A finales de septiembre de 2018, desde este diario nos preguntábamos cómo era posible que hasta ese momento, la nueva RTVE comandada por Rosa María Mateo no hubiera renovado por una segunda temporada La otra mirada.

Y es que, aunque si bien es cierto que la serie no había tenido unos grandes datos de audiencia, sí había sido celebrada por crítica y audiencia por tener un importante mensaje feminista que merece ser divulgado en estos tiempos.

'La otra mirada' fue líder este pasado lunes por encima de 'Brigada' o 'Masters'

Entonces -y siempre- defendimos que la televisión pública no sólo tiene que fijarse en las audiencias sino en el valor social, cultural y educativo de sus series y programas. Y tanto La otra mirada como El ministerio del tiempo, Operación Triunfo, Masterchef, Maestros de la costura o Estoy vivo son ejemplos de ello.

Pocas semanas después, desde RTVE por fin se daba luz verde a la segunda temporada de esta ficción producida por Boomerang porque se deseaba que “la radiotelevisión pública sea un espejo donde las mujeres puedan mirarse y ver reflejada esa otra mirada por la que tantas mujeres venimos luchando”.

Hoy, cuando ya se han estrenado esos nuevos capítulos, los mismos datos de audiencia que un día parecía que la iban a ajusticiar, ahora han venido a demostrar que la televisión pública no puede dejarse llevar por ellos a la hora de renovar sus productos.

Y es que, en menos de un año ha cambiado tanto el consumo de la ficción en abierto en nuestro país, que aquellos datos que un día llevaban a la serie a ser la última opción de la noche (1,5 millones de media), ahora le han aupado a liderar la noche de los lunes.

Y así, después de regresar la pasada semana mejorando los datos con los que despidió su primera temporada (1,6 millones), la ficción de Boomerang superaba este lunes al resto de ofertas de la competencia como Brigada Costal del Sol o Masters de la Reforma.

Con la BBC en el horizonte

Esta noticia, unida a las renovaciones de El Ministerio del Tiempo, Estoy vivo y La Caza. Monteperdido, hacen pensar que por fin la televisión pública ha encontrado su rumbo en la ficción tras años dando bastante tumbos.

Y es que no hay que olvidar que debido a la gestión de José Antonio Sánchez, más preocupado de contentar a sus amigos que de la calidad de los productos, en TVE se dio luz verde a engendros como iFamily o Reinas.

Este viraje es, además, completamente necesario en este nuevo panorama audiovisual en el que la ficción en abierto vive una gran crisis en nuestro país y sólo aquellas cadenas que sepan construir una importante marca en ficción y arriesguen, como así ocurre con la BBC, podrán competir, no en el futuro sino en el presente.