
Esta receta aragonesa es muy antigua y práctica.
Esta receta aragonesa es muy antigua y práctica: perfecta en caso de apagón ya que no requiere ni fuego ni electricidad
En los días actuales, donde los apagones pueden ocurrir de manera inesperada, recurrir a recetas tradicionales y prácticas es una opción inteligente. Es el caso de una de las más antiguas y sabrosas de Aragón.
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El 28 de abril de 2025, España vivió el apagón eléctrico más grave de su historia, afectando a toda la península, incluida Aragón. El corte de suministro comenzó a las 12:30 horas y dejó a millones de personas sin electricidad durante varias horas. Aunque la causa aún no se ha determinado, se especula que una fuerte oscilación en el flujo de potencia pudo haber desconectado el sistema eléctrico español del resto de Europa .
En los días actuales, donde los apagones pueden ocurrir de manera inesperada, recurrir a recetas tradicionales y prácticas es una opción inteligente. Una de las más antiguas y sabrosas de Aragón, ideal en caso de corte de electricidad, es la famosa "migas aragonesas". Este plato, sencillo y nutritivo, se remonta a tiempos en los que la gente debía alimentarse con lo que tenían a mano, sin necesidad de fuego ni electricidad.
Las migas se preparan principalmente con pan duro, un alimento básico que, en tiempos antiguos, se aprovechaba al máximo. En caso de apagón, las migas siguen siendo una excelente opción porque no requieren cocción en una cocina eléctrica ni gas, solo un poco de aceite de oliva, ajo, agua y algunos ingredientes que suelen estar disponibles en cualquier despensa, como chorizo, panceta o incluso verduras, si se tiene.
Ingredientes
Pan del día anterior (preferentemente pan de pueblo)
Aceite de oliva
Ajo picado
Chorizo o panceta
Pimiento verde (opcional)
Sal y agua
Paso 1
Trocear el pan en pequeños trozos o migas. Se puede humedecer un poco con agua si es necesario.
Paso 2
En una sartén grande, calentar el aceite y añadir los ajos picados hasta que estén dorados.
Paso 3
Incorporar el chorizo o panceta en trozos pequeños y freír hasta que se doren.
Paso 4
Añadir el pan y, con ayuda de una cuchara de madera, remover constantemente para que se impregne bien del aceite y los sabores.
Paso 5
Si lo deseas, añade un poco de agua de vez en cuando para evitar que se resequen demasiado.
Paso 6
Cuando todo esté bien mezclado y dorado, las migas aragonesas estarán listas para servirse, con un sabor delicioso y una textura crujiente por fuera y suave por dentro.
Las migas tienen un origen humilde, típicas de las comidas de los campesinos, que las preparaban como un plato de aprovechamiento. En las regiones de Aragón, como en otras partes de España, las migas se adaptaron a los productos locales, como el aceite de oliva, el chorizo, la panceta o incluso el cordero. También se solían acompañar de uvas o higos, combinando lo salado con un toque dulce, una mezcla que caracteriza a muchas recetas tradicionales.
Aunque la receta básica es bastante sencilla, las migas aragonesas tienen muchas variantes. Algunas personas incluyen huevo frito encima o mezclado con las migas, mientras que en algunas regiones se añaden pimientos y tomate para darles un toque más fresco. También es común verlas acompañadas de frutas como uvas o incluso melón, una combinación que aporta un contraste de sabores muy interesante.
Las migas son un plato que refleja la sencillez y sabiduría culinaria de las abuelas aragonesas. Es una receta que no solo es rica en sabor, sino que también es muy nutritiva, ya que el pan aporta carbohidratos, el aceite de oliva grasas saludables, y las carnes curadas proporcionan proteínas. Además, como es un plato que se puede comer tanto frío como caliente, se adapta perfectamente a cualquier momento del día, especialmente para una cena ligera o un almuerzo en familia.