Si los niños vienen de París es lógico que, en Aragón, la fruta venga de Egipto. Así piensa y actúa el Gobierno de Azcón, que ha hecho de cigüeña, distribuyendo canastillas de naranjas y peras recién alumbradas en el continente africano, y que han llegado volando hasta los comedores escolares de nuestra Comunidad. El programa de distribución gratuita de estos alimentos en los colegios tiene el objetivo de que las niñas y niños aprendan a comer sano y valoren la adquisición de hábitos saludables. Además, se aprovecha la ingesta de productos frescos para mejorar el conocimiento del entorno rural en el que nacen frutas y hortalizas tan excelentes como las que nos ofrece el sector agrario aragonés.
Se trata de un magnífico programa, que ha impulsado la Unión Europea y que cuenta con el apoyo del Gobierno de España y ¿el de Aragón? Un buen proyecto puede ser destrozado con una mala gestión, tal y como ha demostrado el Partido Popular. Y esto es lo que hemos denunciado desde el grupo socialista en las Cortes de Aragón, sumándonos a las críticas que han formulado colectivos y asociaciones de todo tipo. Sindicatos agrarios como UAGA, la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado (FAPAR) y más de treinta colectivos que defienden la producción ecológica, el medio rural y la soberanía alimentaria así lo han manifestado.
Resulta curioso que el Gobierno de Aragón pidiera en su día más información a la empresa que se ha adjudicado el contrato, tras observar el precio tan bajo que ofrecía en la licitación. ¿Qué decía esa información? ¿Especificaba entonces que iba a importar dichos productos de esas zonas en lugar de repartir fruta de proximidad? Y, por cierto, hay un grave error en dicho informe. En el cuadro resumen de las ofertas se otorgan 20 puntos a la empresa adjudicataria, por aportar producto ecológico, cuando no ofrece dicha característica en su género, ya que sólo suma esa puntuación a través de una entrega adicional de almendra (¿será almendra aragonesa?). Lo dudo.
“Lo que haces, eres”. Ese es el lema de esta campaña que podemos ver en la publicidad que difunde el Gobierno de Aragón. Una frase que, por desgracia, ha llevado fielmente a la práctica el señor Azcón. Si eres lo que haces, el presidente aragonés es un serio adversario de nuestra gente en el campo y de nuestros niños en los colegios. Pero sobre todo, con lo que hace, es un mal ejemplo. Nos tememos que don Jorge no querrá comparecer en el parlamento para respondernos a la solicitud que le hemos hecho y dé cuenta de tan nefasta gestión. Le recomendamos que visite uno de nuestros colegios para responder a niños, familias y profesores por qué les obliga a comer esas peras de variedad adoquín que hacen peligrar dentaduras y brackets escolares. Ni vendrá a las Cortes de Aragón, ni acudirá a ningún colegio porque le recordarán cómo se está deteriorando el servicio de comidas. No dará explicaciones porque no tiene ni ganas ni argumentos para explicar por qué trae fruta de Sudáfrica y Egipto.
Y una aclaración ante las declaraciones de los miembros del ejecutivo aragonés. Ningún gobierno socialista distribuyó productos de mala calidad dentro de este programa. En todo caso, el problema no sólo es que al PP no le guste la fruta, sino que desprecia los productos aragoneses de calidad y proximidad. Parece que al señor Azcón sólo le gusta la fruta de Ayuso o la de lenta maduración que se sirve en el Ventorro de Mazón.