A escasas horas de que se nombre un nuevo conseller o consellera de Sanidad en la Comunidad Valenciana tras la victoria electoral del popular Carlos Mazón, la jefa de servicio de Urgencias del hospital universitario de San Juan, María Elena Díaz, y la supervisora de Enfermería, Carmen Casado, nombradas por el Gobierno socialista del Ximo Puig, han emitido un informe sobre la situación del servicio que califican de "caos insostenible". 

Las dos profesionales sanitarias aseguran en su escrito que en "el inicio de la Fase 4, que se produjo el 23 de febrero de 2023, llevó consigo una disminución importante del espacio disponible tanto para el personal como para la atención de pacientes y que se asumió por parte de todo el servicio de urgencias por la provisionalidad de la situación y con el objetivo de avanzar en la reforma y adecuación de urgencias".

Y denuncian que esa fase Fase 4, debería haber estado finalizada y entregada el 31 de mayo aproximadamente. También, que actualmente se encuentra finalizada y no entregada, debido a una suspensión temporal de las obras por estar suspendido el expediente de aprobación de la continuación provisional y, por lo tanto, "no disponer de crédito para continuar con la ejecución de la obra".

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O lo que es lo mismo, que pese a los anuncios del conseller socialista Miguel Mínguez y el expresidente Ximo Puig, y como había denunciado el diputado popular José Juan Zaplana y el Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana CESM-CV no hay dinero para terminar la obra.

El propio Puig manifestó el pasado mes de febrero en una visita a Alicante, que "la inversión de la Generalitat en infraestructuras sanitarias de la ciudad de Alicante asciende a más de 50 millones de euros, lo que permitirá llevar a cabo una mejora sustancial de la atención sanitaria en esta ciudad".

El entonces presidente de la Generalitat aseguró que la Conselleria de Sanidad Universal había adjudicado equipamiento para los dos hospitales que prestan servicio a la ciudad de Alicante por valor de 11,6 millones de euros, de los cuales más de 6,1 millones son para el Hospital General Doctor Balmis, y otros 5,4 millones de euros para el Hospital Sant Joan.

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Y respecto a este último, que " la Conselleria de Sanidad ha proyectado la construcción del nuevo edificio de Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica (Isabial), con un presupuesto de 9 millones de euros, así como la ampliación y reforma del servicio de Urgencias, la construcción del Hospital de Día y del servicio de Oncología del Hospital de Sant Joan, con una inversión de 4 millones de euros".

Ahora, sin embargo, las jefas de Urgencias sostiene que "nos encontramos en la peor fase a nivel organizativo y además coincide con periodo estival, lo que supone una gran presión asistencial y en las peores condiciones, por lo que no podemos asegurar la seguridad del pacuente ni la de los propios trabajadores".

Y concluyen que se trata de "una obra prevista para 18 meses de ejecución, que ya se extienden a 27 meses (julio 2023) y que ha sido paralizada sin entregar la Fase 4 (que se encuentra finalizada).

"A pesar del máximo poder de adaptación del personal de urgencias y de la capacidad de organizar el caos, la situación es insostenible e inasumible y no podemos garantizar una asistencia de calidad y con criterios de seguridad clínica", termina el escrito.