"Nos han planteado una oferta totalmente inaceptable e inasumible" y "boicotea la negociación". Así estalla el Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana ante la última propuesta de negociación de la Conselleria de Sanidad. Por eso aseguran que "rechazan de plano el documento recibido" y exigen "que abandone su retórica vacía" durante este proceso.

La evidente tensión que refleja el comunicado del sindicato se mantiene en el tono con que piden al departamento dirigido por Miguel Mínguez. Así "le requerimos para que proceda, en el ejercicio de la responsabilidad que le corresponde, a negociar y dotar de contenido, una propuesta seria y acorde a las necesidades que los facultativos reclamamos". De hecho, critican que su postura es de "mensajes puramente publicitarios, de índole político y electoralista".

A pesar de la dureza de los comentarios, el comunicado resalta que se mantienen con la voluntad de seguir la negociación. Por eso "le volvemos a emplazar para que evite el conflicto". Eso sí, "los responsables de la Conselleria nos han planteado una oferta totalmente inaceptable e inasumible, que redundarán en agravar el principal problema que atenaza a nuestra sanidad pública".

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El conflicto laboral que se mantiene entre el colectivo médico y la Generalitat se concentra, según señalan, en "que nos estamos quedando sin médicos". Con "las pésimas condiciones en las que se ejerce la medicina", "nuestros compañeros decidan irse bien a otras comunidades, a países de nuestro entorno o incluso a la sanidad privada". Por eso demandan "una reforma profunda en la política de personal y de las condiciones laborales en general".

En el repaso a su argumentario señalan que "somos el eje de la sanidad", por lo que reclaman que se "nos permita atender en condiciones y como se merece la ciudadanía, a la que como prestadores de un servicio público esencial nos debemos".

"La fuga de médicos del sistema sanitario público es la verdadera huelga, no declarada, que urge atajar", recuerdan. "Las reivindicaciones planteadas ante la Administración por el Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana CESMCV, van encaminadas principalmente a mejorar las condiciones laborales, así como a evitar que, por el maltrato endémico mantenido desde la Administración, paremos y evitemos que nuestra sanidad pública quede desmantelada".

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La denuncia del sindicato médico recuerda que "la pandemia ha puesto en evidencia, acrecentando y ha dejado al descubierto, la realidad de nuestro sistema sanitario, inmerso en una crónica sobrecarga asistencial".

Lo que detallan enumerando esos problemas como el "aumento de las demoras en la asistencia, con un crecimiento exponencial de las listas de espera que se maquillan derivando a los pacientes en proporciones nunca vistas hasta ahora a la medicina privada, con aumento del número de pacientes a atender inasumibles para los médicos, incluso peores que antes de la pandemia, sin que los tan publicitados refuerzos en supuestos incrementos de plantilla, haya provocado ni tan siquiera en una aparente mejoría".

El comunicado recalca que este proceso no es "un conflicto contra la población", sino "todo lo contrario: lo hemos planteado en defensa de la sanidad pública, que por lo visto, poco o nada importa a nuestros dirigentes y no vamos a caer en la trampa de que se nos criminalice, como así parece que pretenden, de la grave situación que atenaza la sanidad pública valenciana por ejercer nuestro derecho a la protesta".