¿Qué hace a una ciudad accesible? Las respuestas a esa pregunta son el eje de un debate entre los partidos políticos representados en el Ayuntamiento de Alicante. La Fundación DFIMI evalúa con ellos la transformación urbana de estos años y lo que queda por hacer para las personas con diferentes capacidades. "Las barreras sociales están pendientes porque las físicas se ven", recuerdan en este encuentro en el Real Liceo Casino.

El edil del Partido Popular José Ramón González abre el debate valorando los planes llevados a cabo por el gobierno municipal con énfasis en la inversión realizada y la prevista. "Todos tenemos que tener la misma movilidad", recalca en su apertura. Y apunta al trabajo hecho rebajando las aceras en trescientas calles o con el transporte público. "Son cuestiones complicadas, no es fácil, pero lo importante es empezar en este plan de accesibilidad", resume.

La diputada en las Cortes Valencianas por el partido socialista Laura Soler destaca el logro de visibilidad conseguido en el parlamento autonómico con mayor representación de personas con discapacidad: "Eso hay que decirlo alto y claro porque antes eso no se podía ni imaginar". Y esa clave la vivió cuando en 2007 entró como concejala en el Ayuntamiento y eso obligó a que fuera accesible el salón de plenos. Ahora, en cambio, lamenta que para conseguir un taxi adaptado hay que pedirlo con un día de antelación: "Hemos ido para atrás".

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Rosa Menor desde Ciudadanos comparte con Soler su labor en Les Corts. "La accesibilidad debe ser una prioridad en todas las ciudades para minimizar los problemas de quien lo padece", afirma. Y así valora la inversión hecha por el gobierno municipal, en el que participa su formación, pero reconociendo la necesidad de aumentarla porque "una legislatura no es suficiente". De hecho, lamenta que solo el 34 % de las zonas deportivas en la Comunidad Valenciana sean accesibles, según sus datos. "Tiene que haber una vida y un ocio para hacerlo de manera digna", resalta.

El concejal Xavier López de Unidas Podemos agita el debate situándolo en clave de campaña electoral: "La mirada del Gobierno municipal ha sido de espaldas a las personas que más sufren. Ha sido una legislatura absolutamente perdida en políticas de inclusión y diversidad funcional". En la más larga de las intervenciones, critica la falta de escucha a las voces de las asociaciones y de inversión en "las políticas de empleo, que es una de las principales dificultades".

La voz del concejal Rafa Mas por Compromís recuerda que la mejora en la accesibilidad es una imposición europea: "Las leyes exigen que esas obras tienen que ser accesibles. Claro que lo nuevo es así". Por eso su propuesta se dirige a ampliar la exigencia para que sea universal y tenga más en cuenta las limitaciones cuando se trata también de las psíquicas y no solo las físicas. Al igual que López demanda una mayor atención a las asociaciones y " bonificar a las empresas para que contraten".

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La ronda se cierra con el concejal de Vox Mario Ortolá que marca el objetivo de una Alicante "cómoda y segura, también para que vengan a hacer turismo o que se vean atraídas para residir y trabajar". Aunque fuera del equipo de Gobierno municipal, reivindica las negociaciones presupuestarias con "una política de pequeños detalles" como el tratamiento antideslizante y el rebaje de aceras. Y tras ello demandar la gratuidad del aparcamiento en la zona azul para este sector o la creación de una unidad administrativa que agilice la tramitación de ayudas.