Incendios e inundaciones son dos de los peligros que tiene que afrontar la persona que decida cultivar ilegalmente marihuana en viviendas o almacenes. La Policía Nacional de Alicante alerta de los riesgos físicos que comportan estas plantaciones que se suman a los legales por traficar con drogas, después de desmantelar el sistema organizado en una urbanización de La Nucía.

Los avances tecnológicos permiten cultivar la marihuana sin tierra, un método que se conoce como hidropónico, pero eso implica otros peligros. El primero de ellos, como señala la Policía Nacional, está en los fertilizantes. Estos, al ser productos químicos altamente volátiles, requieren de un adecuado manejo.

El segundo está en la electricidad. En muchas ocasiones, indican, se parte de que las instalaciones aprovechan conexiones ilegales con la red. Esos medios rudimentarios y precarios pueden aumentar el riesgo de incendio, que pueden partir de las chispas. De hecho, combinado con los fertilizantes, pueden provocar una explosión o deflagración que afecte tanto al propio domicilio como a los colindantes.

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El peligro para la seguridad pública que generan estas plantaciones desde el mismo momento de su cultivo va más allá del fuego. Otro de los aspectos necesarios para realizar estos cultivos es proveer de un adecuado sistema de riego, y estos también suelen montarse de forma precaria. Con ellos se han generado inundaciones en viviendas que han afectado al resto del edificio. Y de ahí puede provocar un incendio al afectar a las instalaciones eléctricas.  

La urbanización en La Nucía

La plantación desmantelada en La Nucía se componía de casi trescientas plantas que se cuidaban en una casa con sistema de videovigilancia. La Brigada de Policía Judicial de Benidorm se ha encargado de esta investigación en la que han detenido a dos hombres de 51 y 52 años de origen polaco a los que se les acusa un delito de tráfico de drogas.

En la primera fase de la investigación policial recopilaron la información a través de múltiples vigilancias y seguimientos a los dos detenidos, a través de lo cual se situó el domicilio en el que se tenía sospechas de que se hallaba la plantación de marihuana; una vivienda independiente y pareada ubicada en una zona residencial de viviendas unifamiliares de acceso privado, perimetrado y cerrado.

El aspecto exterior del domicilio, ya confirmaba las sospechas de los investigadores en cuanto a la posibilidad de que en su interior hubiera un posible cultivo hidropónico de marihuana. Entre los indicios que así lo señalaban estaba que la puerta de entrada al garaje particular se encontraba completamente sellada con espuma expandible y otros claros síntomas de abandono de la vivienda.

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La siguiente fase de la investigación policial se centró en identificar los papeles o roles que cada investigado tenía en el tráfico de drogas que se estaba llevando a cabo. Y ahí el comunicado de la Policía especifica que fue una labor complicada debido a las continuas medidas de seguridad que adoptaban los detenidos. Entre ellas que la vivienda contaba con un sofisticado sistema de videovigilancia que dificultaba el acceso a las inmediaciones a toda persona ajena.

Finalmente, y una vez recabadas todas las pruebas necesarias que implicaban a los dos detenidos, el juzgado de Villajoyosa autorizó al grupo investigador la diligencia de entrada y registro en la vivienda. En el registro de la vivienda se halló una plantación que albergaba 296 plantas de marihuana que han sido intervenidas por los agentes, así como 9.000 euros en metálico, un vehículo y una motocicleta usados para el transporte de la marihuana cultivada, un inhibidor de frecuencias y varios teléfonos móviles.

A uno de los dos detenidos también se le acusa un delito de falsedad documental al ser hallado un permiso de conducir falso en su poder. Los dos detenidos, de 51 y 52 años de edad, y de nacionalidad polaca, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Villajoyosa.