La situación de la vivienda en Alicante preocupa y mucho. El problema es nacional, pero en la ciudad se ha desorbitado debido a la pérdida de poder adquisitivo y a los récords históricos de un suelo que se vende a precio de oro.

Los 1.997 euros que cuesta un metro cuadrado en la capital provincial, el máximo registrado, hace que muchos alicantinos no puedan asumir las elevadas cifras que se piden por los inmuebles, que desde el año pasado han crecido un 17 % y que cada mes van a más.

Alquilar un piso en Alicante es la solución menos mala para muchos jóvenes que ven que no pueden asumir aún una vivienda en propiedad. Sin embargo, se encuentran con que para poder independizarse también tienen que pagar la cantidad más alta jamás registrada en el territorio, 10,9 €/m2 a marzo de 2024 de media.

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La tasa de inversión máxima recomendada por los expertos es del 30 % en el pago de alquileres, hipotecas o cualquier otro producto relacionado con el mercado inmobiliario. Tomando como ejemplo la capital alicantina, este requisito no se cumple.

El porcentaje que se debe destinar del sueldo a pagar el alquiler en Alicante es el siguiente, teniendo en cuenta el salario mínimo, el medio en la provincia y el nacional, así como los tamaños de las viviendas. Con el nuevo sueldo mínimo de 1.134 euros al mes se tendría que aportar el 57 % del sueldo para un piso de 60 m2, el 78 % para uno de 80 m2 y el 96 % para uno de 100 m2.

El sueldo medio en la provincia es de 1.795 euros. Con esta cantidad habría que destina el 36 % de la renta para un piso de 60 m2, el 48 % para uno de 80 m2 y el 60 % para uno de 100 m2.

La cantidad media nacional es superior, de 2.100 euros. Con esta cifra se iría al alquiler de una casa de 60 m2 el 31 %, el 46 % para una de 80 m2 y el 52 % para una de 100 m2. 

Esta situación afecta principalmente a los jóvenes que buscan emanciparse. Al no tener suficiente dinero para adquirir una residencia en propiedad, optan por alquilar, lo que elimina cualquier posibilidad de ahorro y hace que al final sea cada vez más difícil llegar a comprar.

El círculo vicioso no solo no disminuye con el tiempo, sino que se va enroscando en una tendencia alcista que envuelve al mercado de la vivienda. De esta forma, a muchos jóvenes se les hace inviable poder afrontar la entrada. Mientras que el primer pago de un piso en la ciudad costaba en 2019 alrededor de los 38.500 euros, en 2023 el importe a abonar ya era de más de 51.000. Prueba de esta situación crítica es que la edad media del perfil de comprador de primera vivienda se ha retrasado en los últimos años en el territorio nacional. 

En 2004, casi el 50 % de los jóvenes españoles de 16 a 29 años poseían una vivienda en propiedad. Hoy en día la cifra cae hasta 29 %, según la cuenta especializada Datadicto con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). La caída en el porcentaje de personas con casa en propiedad también se ve con claridad en la franja de 30 a 44 años, que ha pasado del 71 % al 55 % en solo 20 años.

Se paga el doble que hace 10 años

El precio del alquiler se ha duplicado en una década. El portal inmobiliario Idealista registra como primeros datos el valor en octubre de 2008, cuando el m2 estaba a 7 euros. Desde esa fecha empezó a bajar hasta que llegó al mínimo registrado en abril, mayo y junio de 2012 con 5,2  €/m2. Doce años después el precio no ha parado de subir y las sucesivas crisis, provocadas por el coronavirus primero y la Guerra de Ucrania después, han hecho que se roce los 11 €/m2. 

Gráfica de la evolución del precio del alquiler medio por metro cuadrado en Alicante. Jorge Verdú Idealista

De toda la ciudad, la zona de Playa de San Juan-El Cabo es la más cara con 12,5 €/m2, mientras que Los Ángeles -Tómbola-San Nicolás con 8,5 €/m2 y Virgen del Remedio-Juan XXIII con 8,6 €/m2 son las áreas más asequibles.