El calzado, producto esencial en la economía de Alicante, también está inmerso en una compleja red internacional que presenta desafíos para las empresas que lo comercializan desde la Comunitat Valenciana. Con la jornada 'Descifrando la Economía Global: Claves para el sector del Calzado', empresarios y emprendedores han analizado los retos del sector en Elche Parque Empresarial. Entre las principales conclusiones que se han extraído está la resistencia a la inflación del sector y la debilidad europea frente a Estados Unidos.

GESEM Consultoría, desde su área de Agencia de Valores, y la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (AVECAL) han sido los organizadores del evento, donde la inestable situación económica ha sido uno de los principales puntos.

La sesión profesional ha comenzado con una primera intervención que ha corrido a cargo de Kevin González García, analista financiero en GESEM AV. En ella se ha explicado la importancia de los ciclos económicos, sus características y las diferentes etapas que los componen.

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Sergio Serrano, gestor patrimonial y director general de GESEM, ha explicado que, "en un contexto donde la economía global se convierte en un factor de futuro determinante, el análisis de las principales magnitudes macroeconómicas adquiere una relevancia especial, principalmente para la industria del calzado".

GESEM resalta que, en el ámbito del calzado, "la tasa de inflación ha sido notablemente inferior a la registrada en otros sectores, lo que ha resultado un aumento de los precios más moderado respecto a la inflación general y los costos". Tras el impacto del Covid-19, este sector ha experimentado una disminución en sus márgenes y ha enfrentado dificultades para competir con los niveles de precios de otros sectores debido a la intensa competencia. "Esta batalla de precios se ha revelado como un desafío considerable para lograr un posicionamiento competitivo exitoso", ha expresado Serrano.

En el tema de la exportación, se ha coincidido en que los países del sur dan esperanza al mercado. Durante la jornada se ha explicado que la situación económica en Europa es más débil que en EE. UU.: "Se va deteriorando y no hace más que deteriorarse", ha afirmado Serrano.

Así, se ha señalado a Alemania como uno de los países más mal parados de la zona euro al que le está costando mucho superar las consecuencias de la guerra de Ucrania.

No todas las conclusiones de las jornadas han sido negativas. Francia, Portugal, Italia e incluso España están soportando mucho mejor los datos macroeconómicos y la situación actual. "Francia se muestra resiliente y España está a la cabeza de Europa siendo su economía la que más está creciendo en Europa de forma clara, donde además vemos que la confianza del consumidor sigue mejorando", ha concluido Serrano. La entidad advierte de los grandes productores como China, que a pesar de que se encuentra en un momento de debilidad siguen creciendo.