La inestabilidad política en el Ayuntamiento de San Vicente se ha trasladado a los tribunales. Y el alcalde Jesús Villar (PSOE) vuelve a estar en el epicentro del temporal. El jefe de los Servicios Jurídicos del Ayuntamiento, Ramón Cerdá, le ha denunciado por "prevaricación administrativa" y el juzgado de Instrucción número 1 ha admitido la denuncia.

El 13 de septiembre el juzgado pidió al Ayuntamiento que aporte el expediente de la prórroga del contrato de mantenimiento y limpieza de las zonas verdes del municipio. Desde entonces, Villar no ha hecho pública ni la denuncia del abogado municipal ni las posibles causas por las que está siendo investigado. A mediados de mes hubo pleno extraordinario y el miércoles, otro ordinario.

No obstante, preguntado por este diario, Villar reconoció ayer el requerimiento judicial y su condición de investigado. Según explicó, se trata de la prórroga que hizo por decreto de la contrata de los jardines municipales mientras se termina de licitar un nuevo pliego de condiciones para la nueva adjudicación.

Villar asegura que firmó el decreto por necesidad del servicio y con todos los informes favorables. "Lo que tendrá que explicar el jefe de los Servicios Jurídicos es por qué interpuso una denuncia y al mismo tiempo defendió hace escasas fechas al Ayuntamiento frente a una demanda de la empresa prorrogada", aseguró el alcalde.

El Ayuntamiento de San Vicente ha tenido que prorrogar varios de sus mayores contratos en los últimos dos años porque, lo justifica, no ha tenido a tiempo los pliegos para las nuevas adjudicaciones. Previamente había hecho lo propio en 2017 con este contrato de zonas verdes, con un valor anual de 1,2 millones de euros. Es este contrato el que ha pedido el juzgado.

Cuestiones personales

Ante los recientes sucesos en el seno de su equipo de Gobierno y su partido, Villar afirmó que nada tiene que ver este asunto. "No quiero entrar mucho porque tengo que defenderme, pero creo que esta denuncia es un asunto personal porque el mismo funcionario ha interpuesto otras demandas contra el ayuntamiento por temas laborales que le hemos denegado".

Fuentes cercanas al consistorio explicaron que Cerdá lleva años enfrentado al alcalde socialista por mejoras laborales que considera que le corresponden. Pero Villar las ha desestimado todas. Este diario intentó ayer ponerse en contacto con Cerdá para conocer su versión, sin éxito.

Los líos

Esta misma primavera, la Ejecutiva local del partido expedientó a Villar. Con un equipo de Gobierno completamente fracturado, Villar se vio abocado a enfrentarse directamente al concejal José Luis Lorenzo, quien controlaba el partido como peón del histórico dirigente José Gadea, en su día tránsfuga.

Salieron entonces a la luz una serie de conversaciones de Whatsapp en las que se insultaba gravemente a Villar. Los protagonistas eran la jefa de prensa, Ana López, que entre otras cosas pedía "cortarle el cuello", el exportavoz municipal, Jesús Arenas que calificó al alcalde como "gran hijo de puta" y el propio Lorenzo. El PSPV-PSOE salió en defensa del alcalde y provocó sus dimisiones.