El cuartel de la Guardia Civil de Calpe.

El cuartel de la Guardia Civil de Calpe. Guardia Civil

Alicante

Caen en Alicante un homicida y un prófugo de la justicia francesa tras robar a turistas en la costa de Alicante

Tras ser arrestados, los agentes comprobaron que ambos estaban sujetos a órdenes europeas de detención emitidas por la justicia francesa.

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Dos hombres buscados por las autoridades francesas han sido detenidos en la provincia de Alicante, acusados de participar en al menos una decena de robos con fuerza en vehículos aparcados cerca de zonas costeras, según informa Efe.

Uno de ellos está implicado en un caso de homicidio, mientras que el otro se había fugado de una prisión en Francia. Así lo ha comunicado la Guardia Civil.

Tras ser arrestados, los agentes comprobaron que ambos estaban sujetos a órdenes europeas de detención emitidas por la justicia francesa. El primero tenía pendiente un proceso por homicidio y también una requisitoria en España por robo con violencia. El segundo cumplía condena en Francia por delitos de robo, estafa, extorsión y fraude cuando logró escapar de la cárcel.

Los detenidos, de 42 y 31 años, ambos de nacionalidad argelina, fueron presentados ante el Juzgado de Instrucción de guardia en Dénia por su presunta implicación en robos con fuerza. Posteriormente, fueron puestos a disposición de la Audiencia Nacional en el marco de los procedimientos de extradición.

La operación que permitió su detención se inició el pasado mes de mayo, tras detectarse un repunte de robos en coches estacionados en aparcamientos de tierra no vigilados próximos a playas concurridas, sobre todo en las localidades de Calpe, Moraira y Xàbia, zonas muy frecuentadas por turistas.

Según la investigación, los sospechosos se desplazaban a estos lugares con gran afluencia de visitantes, identificaban vehículos desatendidos y forzaban puertas o ventanillas para sustraer objetos de valor, como joyas, dinero en efectivo o aparatos electrónicos.

Durante una vigilancia discreta en Calpe, los investigadores detectaron un coche ocupado por dos individuos que mostraban una actitud sospechosa. Uno de ellos fue observado deshaciéndose de una mochila en un contenedor, lo que llevó a los agentes a proceder a su identificación.

El registro del vehículo reveló numerosos efectos presuntamente robados: una cámara deportiva, un trípode, un palo selfie, una batería externa, diversas joyas, perfumes de alta gama y 1.500 euros en metálico. También se encontraron herramientas utilizadas para forzar vehículos. La mochila recuperada fue reconocida por una turista extranjera, al igual que varios de los objetos fotográficos hallados en su interior.

La Guardia Civil confirmó posteriormente que ambos arrestados figuraban como fugitivos reclamados por Francia.