La cárcel de A Lama, en Pontevedra.

La cárcel de A Lama, en Pontevedra. Europa Press

Pontevedra

Un preso agrede con un pincho a un funcionario en la prisión de A Lama (Pontevedra)

El sindicato TAMPM denuncia una "situación límite" y reclama más medios y protección para los trabajadores penitenciarios

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Un interno del Centro Penitenciario de A Lama, en Pontevedra, ha agredido a un funcionario con un pincho. Los hechos ocurrieron este miércoles después de que la víctima interviniera para frenar un encontronazo entre varios reclusos.

En un comunicado remitido a Europa Press, el sindicato Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM), asociación que engloba a funcionarios de prisiones, ha descrito los hechos como una "situación límite".

Según explica la asociación, la agresión se desencadenó tras un encontronazo entre varios reclusos en la cola del economato. Cuando uno de los funcionarios intervino para frenar el conflicto, un interno sacó de su mochila un pincho carcelario y lo persiguió con intención de apuñalarlo. Tras varios intentos, consiguió golpearle en el rostro.

Varios funcionarios acudieron al lugar de los hechos mientras el agresor se atrincheraba en el patio. Aún armado, lanzó amenazas contra el personal que trataba de contener la situación.

"Lejos de ser rechazado, fue jaleado por otros internos, en un acto de absoluto desprecio hacia la autoridad", valora el sindicato.

Finalmente, el interno fue reducido y trasladado a aislamiento. Asimismo, seis reclusos más fueron conducidos al mismo régimen disciplinario por la implicación directa en el conflicto y "alentar el clima violento".

La agrupación condena la agresión "con total rotundidad": "No fue un incidente puntual, fue la consecuencia directa del abandono sistemático de los trabajadores penitenciarios, que operan en un entorno cada vez más hostil, sin medios suficientes y sin el respaldo legal que garantice su seguridad".

De esta forma, TAMPM exige el reconocimiento del personal penitenciario como agentes de la autoridad y de su labor, como profesión de riesgo. "Mientras la administración nos ignore, las cárceles seguirán siendo escenarios de violencia latente", defiende en el comunicado.