Ahorrar, misión imposible
Mientras los hogares españoles viven la mayor crisis de poder adquisitivo de los últimos 30 años nos encontramos con un récord histórico de recaudación de impuestos en España. En el primer semestre del año se alcanzaron los 107.009 millones.
Y no sé si alguien más tiene esta sensación pero, a mí, me está costando mucho ahorrar.
Supongo que no soy el único ya que según el INE los hogares están gastando más de lo que logran ingresar en este 2022, básicamente porque la inflación se ha llevado su poder adquisitivo de un plumazo y el sistema impositivo no alivia si no que agudiza los daños.
Esto es algo que me preocupa porque siempre he asociado que si estoy ahorrando, estoy teniendo éxito pero últimamente está siendo complicado.
Ahorrar no es solo guardar, sino saber gastar y es ahí donde me toca poner el foco. Por ejemplo, este año no me iré de vacaciones. Y si me voy será unos días a casa de familiares y lugares cercanos.
Tengo que controlar el gasto, que es todavía más duro que conservar excedentes. No aliviar mi desmedida sed presente de ocio este verano es duro pero una cosa tengo clara: El ahorro ofrece a las personas más capacidad para pensar libremente por no atarlas irremediablemente a un sistema de dependencias.
El ahorro también es requisito clave para la inversión así que será duro pero hay que seguir ahorrando.
Además, no solo es más difícil ahorrar sino que nuestros ahorros en papel valen cada vez menos. Es decir, el dinero que tenemos guardado en un cajón o en el banco ha bajado su valor en torno al 10%.
Es época de grandes sacrificios.