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En TikTok, una limpiadora del hogar ha alzado la voz y ha puesto palabras a una frustración compartida por muchas trabajadoras del sector.

Cansada de escuchar críticas constantes sobre las tarifas que cobran por su labor, decidió responder con un mensaje contundente: "Paga, o si no, lo haces tú".

Su intervención no solo refleja una queja individual, sino una defensa colectiva del valor del trabajo doméstico profesional.

Según relata en su vídeo, una frase se repite con frecuencia tanto en redes sociales como en la vida cotidiana: "La chica de la limpieza me cobra a 10 euros la hora".

Esta afirmación, que parece inocente, lleva implícita una queja que muchas limpiadoras escuchan con demasiada frecuencia.

Ella lo deja claro: "Primero, realizamos un servicio que tú no puedes o no quieres hacer, por eso nos contratas".

Y continúa con lógica firme: "Nosotros te damos el precio, tú lo aceptas o no; aquí está la libertad, la oferta y la demanda".

La trabajadora no habla solo por ella, sino por muchas otras compañeras que también se sienten infravaloradas y cuestionadas.

"Creo que muchas de nosotras que nos dedicamos a la limpieza lo escuchamos", dice.

Además, aporta una perspectiva importante sobre los costes reales que asumen quienes se dedican a la limpieza, especialmente cuando trabajan como autónomas.

"Yo trabajo para una empresa, pero si fuera autónoma y te cobrara 10 euros, piensa que tengo que descontar la cuota de autónomos, el desplazamiento, los productos, el trimestral y todas esas cosas", explica.

Con esta reflexión, busca explicar que esos 10 euros brutos, en realidad, se reducen a mucho menos. "A lo mejor me saco 5 euros como mucho", reconoce.

Más allá de la carga fiscal, una de las críticas que más indignación genera es la comparación con otros trabajos, como los de oficina, que socialmente se consideran más cualificados.

"He escuchado comentarios como 'es que esta cobra 10 euros, más que yo como administrativa'. Pero a lo mejor tú eres administrativa como empleada, pero si te pones como autónoma, vas a poner una cuota más elevada", responde con contundencia.

Con ello, denuncia una percepción injusta que infravalora el trabajo físico y necesario que ellas realizan para ganarse la vida. 

Su intervención tiene un objetivo claro: visibilizar el valor real del trabajo de limpieza y pedir respeto hacia quienes lo desempeñan.

No es una súplica, sino una exigencia: "¿Qué pretendes? ¿Que te hagamos el trabajo gratis?".

Y remata su mensaje de forma clara y directa: "Si quieres que te realicemos un servicio, paga, y si no, lo haces tú. Simple y sencillo".

Con estas palabras, su vídeo ha conectado con muchas personas, porque no es un caso aislado, sino una realidad que miles de trabajadoras enfrentan a diario, sosteniendo hogares sin recibir el reconocimiento que realmente merecen.