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La Jungla / Social

25 chapuzas que emocionaron a McGyver

En la Jungla. Todos nos podemos creer McGyver en un momento dado, venirnos arriba y decir "esto lo hago yo en un periquete". Y no, el resultado no es el mismo.

7 agosto, 2018 13:57

En esta vida no siempre hay tiempo para grandes soluciones y a veces hay que tirar con lo que tienes a mano. ¡McGyver triunfó gracias a ello! Cogía un chicle usado y una goma de pollo y fabricaba un arma capaz de deshacerse de todos los guerrilleros vascos -qué gran mito aquel episodio-. Sin embargo, resulta que no todos los seres humanos somos McGyver y somos el opuesto total a un ingeniero.

Por eso, cuando intentamos resolver algo por nosotros mismos queda algo así:

Y nos sentimos superorgullosos de nuestra obra. Casi creemos que podríamos salir tranquilamente a la autopista con esta maravilla de arreglo, y apenas nos ha costado 15€, oye.

Aunque los hemos visto peores. Porque no siempre hay tiempo para esperar a que traigan la pieza de Alemania:

El Espantapájaros de El Mago de Oz está buscando su mano:

Si encaja, todo correcto:

En esta, la combinación de colores le da un aire a coche de carreras, no se puede negar:

La industria del CD está muerta, decían:

¿Tu coche no tiene uno de esos sensores que te avisan que estás a punto de dar un golpe al coche de atrás al aparcar? ¡No hay problema! Un pollo de goma es la mejor solución:

Así, uno se viene arriba y se convierte en un ingeniero de la NASA para inventarte esta solución al calor en el cogote:

Y es que no lo neguemos, hay chapuzas que son tremendamente útiles para un viernes por la noche:

Pero el coche no es el único lugar en el que hacemos chapuzas. También en casa, empezando por el el cuarto de baño, donde no sueles querer que nadie te moleste:

Sin embargo algunas veces estás obligado a dejar un pequeño espacio para mirones...

Y es que hay quien tiene problemas al entender que el espacio ocupado por un cuerpo sólido no puede albergar a otro cuerpo sólido:

No sé, a ver cómo te explico el problema:

¿Para qué bajar al supermercado a por un teléfono de ducha nuevo si hay botellas?

¿Quién dijo que las escaleras de Penrose eran imposibles?

Con cosas así, uno sale a la calle y algo parece decirle que pare:

Uno ya no sabe si las escaleras suben o bajan...

Pero también pueden ponerse poéticos con escaleras a ninguna parte que representan la vida:

Solo esperemos que nunca haya un incendio...

Y las pobres personas con movilidad reducida tienen que soportar cada cosa...

Que a uno ya no le extraña que no sepan dónde tienen la cabeza...

Pero hay que reconocer que cuando trabajas en la construcción de vez en cuando te ves obligado a tomar decisiones creativas. Como cuando el abuelo de Up no quiere irse de su casa y tú tienes que hacer una carretera. Exactamente lo que ocurrió en China:

Lo que no sabemos es cómo solucionará esto el próximo maquinista que pase:

Esperemos que no lo solucione con una chapuza que supere a la chapuza.