Amada, este jueves, acompañando a su nieta de la que es tutora legal, Britany, de 5 años, en una habitación de la UCI Pediátrica del Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia.

Amada, este jueves, acompañando a su nieta de la que es tutora legal, Britany, de 5 años, en una habitación de la UCI Pediátrica del Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia. Cedida

Reportajes

Britany, de 5 años, en coma tras ahogarse en Murcia: "Pasó cinco minutos en el fondo ante los socorristas"

La Policía Nacional investiga cómo sufrió un paro cardíaco una niña tras caer al agua en su clase de natación en un complejo deportivo de La Flota.

24 mayo, 2024 02:48
El Palmar

A la pequeña Britany le gustaba ponerse su bañador de Ladybug y que le hicieran una trenza en su larga melena, antes de enfundarse el gorro de plástico, para disfrutar de sus clases de natación en la Piscina de La Flota en Murcia. Por desgracia, a esta niña, de solo 5 añitos, que permanece ingresada en la UCI tras estar a punto de morir ahogada en esa instalación, ahora mismo le salvarían la vida los increíbles poderes de fuerza y resistencia que tiene su superheroina de dibujos: Ladybug. Pero Britany solo es una niña indefensa. "No abre los ojos", se lamenta su abuela, Amada. "Está en coma".

El personal del Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia se está volcando para salvar a Britany: ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos desde este miércoles, cuando el 112 recibió dos llamadas desde la Piscina de La Flota, a las 18.24 horas, reclamando una ambulancia porque habían sacado del agua a una niña que estaba inconsciente. "Según los llamantes, no sabían cuánto tiempo había permanecido sumergida en el agua, y habían comenzado a realizar la reanimación cardiopulmonar", tal y como refleja el mensaje difundido por los Servicios de Emergencias.

"Mi hija me llamó por teléfono, llorando, para decirme que Britany estaba sangrando por la nariz y por la boca", según relata Amada, sin obviar ni un solo detalle ni poner paños calientes a lo sucedido, debido a que concede esta entrevista en exclusiva a EL ESPAÑOL para anunciar que emprenderá acciones legales contra la empresa gestora de este complejo deportivo: con piscina, gimnasio, servicio de fisioterapia... "Esto no va a quedar así".

Testimonio de la abuela de Britany. Una niña de 5 años que estuvo a punto de ahogarse en la Piscina de La Flota de Murcia.

- ¿Por qué emprenderá acciones legales?

- Amada: Han cometido una negligencia con mi niña.

- ¿En qué basa esa afirmación?

- Mi hija, Gabriela, llevó a natación a Britany, de 5 años, y a su hermana mayor, Lily, de 6 años. Las cambió en el vestuario y salió a la cafetería de la piscina a seguir la clase a través de la cristalera, como hacen todos los padres. Fue Lily quien se dio cuenta de que su hermana estaba en el fondo y como ella no sabe nadar empezó a gritar, pero la niña llevaba cinco minutos en el fondo del agua porque llegó a sangrar y eso no es de un minuto. Ellos tienen que asumir la responsabilidad de lo que han hecho.

Los monitores no están nada cualificados porque ninguno sabía reanimar a la niña. Lo primero que tenían que hacer es enseñarles a socorrer porque se supone que son socorristas, pero de socorristas nada. Al menos, con mi niña no lo han sido. Britany pasó cinco minutos en el fondo de la piscina ante los socorristas. Pienso ejercer acciones legales.

El periodista de EL ESPAÑOL se ha personado este jueves en el complejo deportivo del Distrito de La Flota de Murcia donde residen 23.000 personas, para recabar la versión de los responsables de las instalaciones, pero no ha obtenido respuesta, a pesar de haber dejado sus datos personales, medio y teléfono de contacto en el control de accesos.

La Policía Nacional ha abierto una investigación para esclarecer cómo acabó la menor en el fondo de una de las dos piscinas que tiene el complejo, a pesar de que -supuestamente- había cinco empleados en la zona acuática. Todo ocurrió en el vaso pequeño que mide 16,5 metros de largo y 9 metros de ancho, con una profundidad de 1 metro y 10 centímetros en ambos extremos y 1 metro y 20 centímetros en el centro.

"La zona acuática del complejo siempre está vigilada por un socorrista, pero el número de monitores depende de los grupos que hay en el agua", tal y como explica extraoficialmente un miembro de la empresa. "Los policías que vinieron el miércoles, hablaron con el socorrista y con la técnico que era responsable del grupo de la niña". De hecho, el 112 confirma que la Policía Nacional acudió a la instalación junto a la Policía Local. 

En primer plano, el vaso pequeño de la instalación acuática del Distrito de La Flota en el que se encontraba la pequeña Britany.

En primer plano, el vaso pequeño de la instalación acuática del Distrito de La Flota en el que se encontraba la pequeña Britany. Badía

Britany acudía a las clases de natación del turno del lunes y el miércoles. A las 17.45 horas, la niña se dirigió al vaso pequeño que se divide en rectángulos para las clases de los más peques. "La monitora estaba preparando el material y la niña estaba sentada en el bordillo de la piscina", según detalla un empleado de La Flota. "Estaba preparando el churro para colocárselo. No se sabe si la niña se cayó al agua o se tiró ella sola".

Lo único que está claro es que a la pequeña la sacaron del fondo, con una parada cardiorrespiratoria por síndrome de inmersión. "Los policías le pidieron los títulos formativos a todos los que estaban dando los cursos de natación y la ludoteca acuática". El perfil de la plantilla responde a monitores de natación, socorristas con cursos de primeros auxilios, titulados con FP en Técnico Superior en Actividades Físicas y Deportivas, incluso con la licenciatura de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte.

De ahí la indignación que muestra la ecuatoriana Amada, desde la UCI Pediátrica de La Arrixaca, ante la reacción que tuvieron con el terrible suceso que sufrió Britany: "Tuvo que venir una persona de fuera a reanimar a la cría. Me parece tan vergonzoso y tan ilógico, que teniendo monitores no puedan socorrer a un crío o a un adulto. Esta vez me ha tocado a mí, pero mañana le puede tocar a otra persona o a otro niño". 

Amada, este jueves, en la puerta de la UCI Pediátrica de La Arrixaca, antes de entrar a la habitación donde está ingresada su nieta Britany.

Amada, este jueves, en la puerta de la UCI Pediátrica de La Arrixaca, antes de entrar a la habitación donde está ingresada su nieta Britany. Badía

Una de las claves de que la niña, de 5 años, no muriese ahogada mientras llegaba una Unidad Medicalizada de Emergencias, se debió a la presencia en las instalaciones deportivas de una intensivista y una enfermera. Tal extremo es corroborado por la propia Amada: "La reanimaron cuando estaba muerta".

Desde el miércoles por la tarde, esta inmigrante, nacida en la ciudad portuaria de Guayaquil hace 48 años, vive el paso de las horas con el alma en vilo, sin despegarse de la cama de su querida nieta. "Todos estamos desbordados por lo que ha pasado, por una negligencia de ellos", insiste indignada a EL ESPAÑOL. "Esto es una negligencia, la podrían haber socorrido y no habría pasado esto. La niña lo está pasando mal".  

Amada ha tomado la decisión de emprender acciones legales por la nula respuesta que ha recibido de los gestores del complejo deportivo de La Flota. "Cuando mi hija me llamó fui a la piscina y cuando llegué, ya estaba allí la ambulancia y la Policía: me dijeron que me tranquilizase porque estaban reanimando a la cría", tal y como relata esta ecuatoriana. "La empresa no me dio ninguna explicación entonces y aún no me ha llamado para preguntar cómo está mi niña, a pesar de que tienen mi teléfono porque yo también soy usuaria de las instalaciones desde hace dos años".

Precisamente, ese fue el primer motivo por el que decidió apuntar a sus nietas en un curso de natación. El otro motivo fue porque Britany y Lily se lo pidieron a su querida abuela: "Ella y su hermana mayor ya hacían gimnasia en ese complejo de La Flota y las apunté porque las crías querían aprender a nadar. Ellas mismas me lo pidieron y las inscribí".

Las instalaciones deportivas del Distrito de La Flota en Murcia donde se produjeron los hechos.

Las instalaciones deportivas del Distrito de La Flota en Murcia donde se produjeron los hechos. Badía

Amada confiesa que se arrepiente cada minuto de su decisión de apuntar a natación a las dos hermanas. "Desde que me subí a la ambulancia no me he movido del hospital. He tenido que dejar mi trabajo de barbera y yo soy la que sustenta la casa". Prueba de ello es que a lo largo de la entrevista, en más de una ocasión, se refiere a sus nietas como sus "hijas", al tiempo que aclara que tiene "la tutela legal" de Britany, de 5 años, de Lily, de 6 años, y de sus dos hermanos: de 2 años y 10 años.

"Ellos han tenido una infancia complicada y yo les estoy dando una estabilidad a los niños, como para que ahora vengan a arruinarle la vida a Britany", reflexiona con impotencia esta joven abuela, como lo demuestran los 48 años que refleja su carné, sus tatuajes, su piercing y su outfit desenfadado. "Lily, la hermana de Britany lo está pasando muy mal porque lo vio todo y anoche se puso a gritar y mi hija, Gabriela, sufre al recordar cómo vio a su sobrina ensangrentada en la piscina y no le dejaban acercarse".

- ¿Qué le han contado ellas?

- Amada: Que ha sido un descuido porque la que se dio cuenta de que Britany estaba en el fondo de la piscina fue su hermana, Lily, de solo 6 años. Cuando mi hija, Gabriela, vio que había mucha gente alborotada por la piscina, se percató de que era Britany la que estaba en el agua y ninguno de los monitores sabían reanimarla.

- ¿Qué le han dicho los médicos sobre el estado de Britany?

- Britany está muy mal, inconsciente, con una sonda, con respiración artificial, intubada, sedada… Los médicos me han dicho que tengo que esperar. Estamos esperando a que sea lo que Dios quiera que sea. Le tienen que hacer unas placas porque tiene los pulmones encharcados y este viernes tienen que hacerle un escáner para descartar que no tiene una lesión cerebral. De momento, no nos dicen nada más. 

Nos toca esperar porque todo está en manos de Dios con una criatura de 5 años a la que no le habían puesto ni flotadores y cuando yo la matriculé, les dije que no sabía nadar. En la instalación me respondieron que los monitores estaban en la piscina, encima de los niños y que les ponían flotadores y una boya. Pero al final, no le habían puesto nada a la cría. Cuando mi hija la vio, me ha dicho que no tenía nada puesto, de lo contrario no se habría hundido.