El equipo que ha ido a 'desinfectar' el lugar del mitin de Vox.

El equipo que ha ido a 'desinfectar' el lugar del mitin de Vox. Jorge Barreno

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Desinfectando la ‘Plaza Roja’ de Vallecas del “virus de Abascal y Vox”: cepillo, lejía, EPI y mucho rencor

Una veintena de jóvenes de la 'Coordinadora Antifascista' ha vuelto al lugar del mitin en el que, este miércoles, se vivieron episodios violentos. 

8 abril, 2021 20:03
Luis Casal Diego Rodríguez Veiga

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Tras vivir uno de los mitines más violentos que se recuerda en Madrid, la llamada 'Plaza Roja' de Vallecas sufre ahora su resaca. Este jueves, un grupo de unas 20 personas ha vuelto al escenario en el que, este miércoles, la formación política Vox celebró un acto y se ha puesto a desinfectar el suelo con lejía. Mientras, han estado profiriendo distintos cánticos contra el líder del partido de extrema derecha, Santiago Abascal, al que tachan de fascista. 

La llamativa situación, que ha pillado a los vecinos por sorpresa, ha empezado alrededor de las 19.00 horas y el grupo, en su mayoría formado jóvenes, ha aparecido vestido con EPI y distintos elementos de limpieza. Acto seguido, se han puesto a limpiar el suelo esparciendo lejía y pasando escobas y fregonas. Para alertar de las zonas mojadas, han usado los tradicionales carteles que se encuentran, por ejemplo, en el Metro. Aunque esta vez han llevado la leyenda de "¡Atención! ¡Fascismo!"

Durante la performance, los jóvenes han estado cantando proclamas como "A desinfactar, a desinfectar, el virus de Abascal", "Fuera fascistas de nuestros barrios" o "Esto es mierda pura, hay que sacarla de aquí". También han puesto música. En un primer momento, ha sonado la canción de Los Cazafantasmas y una versión de La huelga, de Rolando Alarcón, que en lugar de "a la huelga" dice "a Vallecas". 

Todo esto lo han hecho con una gran pancarta en la que se puede leer "Desinfectamos Vallecas de fascismo". El único símbolo reconocible es el de Coordinadora Anfascista de Madrid, una coordinadora que, desde hace años, sirve como unión de colectivos y asambleas contra lo que ellos consideran fascismo. 

El acto ha sucedido después de una convocatoria que se ha movido por redes sociales y en la que no aparece un convocante como tal. Se ha empezado a viralizar un cartel de "Desinfecta Vallekas de fascismo", en el que se retrata a Abascal como un virus y en el que se puede leer "¡El fascismo es un virus y Vallekas, la vacuna!".

Alerta, fascismo, se ha podido leer en algunos carteles.

"Alerta, fascismo", se ha podido leer en algunos carteles. Jorge Barreno

Lo que ha sucedido es algo que ya reivindicó esta semana el fundador de Podemos Juan Carlos Monedero. El teórico de la formación morada pidió que, en vez de ir al mitin de Vox a buscar pelea, la gente fuera a desinfectar. "Vallekas no tiene que regalarle la foto que están buscando hoy los fascistas. Que repiquen las campanas, que en las ventanas suenen canciones antifascistas, que no haya nadie escuchando el discurso de odio. Y mañana vamos todos a desinfectar el suelo con lejia", publicó en Twitter. 

El peor mitin

El de este miércoles fue, sin duda, uno de los mitines más violentos que se recuerdan en Madrid y se ha asemejado a otros que se han vivido en comunidades autónomas muy polarizadas como País Vasco o Cataluña. Vox eligió la 'Plaza Roja' -que se llama así por los ladrillos del suelo y no por la ideología de nadie- de Vallecas para dar el pistoletazo de salida a su campaña de cara a las elecciones autonómicas del próximo 4 de mayo. 

División en Vallecas tras los disturbios de ayer durante la presentación de la campaña de Vox

El evento ya se intuía tenso antes de arrancar y así acabó siendo. Varios grupos de extrema izquierda se propusieron, desde días antes, boicotear el acto y "expulsar" a Vox de Vallecas. La mayoría de partidos de izquierda que se presentan a las elecciones desaconsejó la acción, alegando que esa era justo la fotografía que Vox quería obtener en lo que consideraban "una provocación". Sin embargo, la llamada a la calma no sirvió de nada. 

El ambiente tenso terminó de estallar cuando Santiago Abascal se acercó al límite del cordón policial y se desató la violencia. Una de las imágenes más impactantes que dejó la jornada es la de un agente de la UIP cayendo al suelo, mientras se le sale el casco y los manifestantes le dan patadas. Los disturbios dejaron un total de 35 heridos, 21 de ellos policías nacionales.