Comunicado fundacional de los GAAR, el brazo ultraviolento de los CDR, ante una imagen del corte de la AP-7.

Comunicado fundacional de los GAAR, el brazo ultraviolento de los CDR, ante una imagen del corte de la AP-7. E.E.

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Instrucciones para la noche de la ira: así preparan los CDR más violentos el 21-D

13 diciembre, 2018 03:05

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La kale borroka del independentismo se prepara para la noche de la ira: el próximo 21 de diciembre pretenden bloquear Cataluña saboteando infraestructuras, comunicaciones e incluso a las fuerzas de seguridad. El brazo ultraviolento de los CDR, llamado GAAR (Grupos Autónomos de Actuación Rápida), se presentó en sociedad el pasado 5 de diciembre con un manifiesto. Ahora acaban de hacer público el manual de actuación. Y en línea con la folklorización del Procés, lo han bautizado como "El Cançoner" (El Cancionero).

El cancionero es un manual de guerrilla urbana que ha sido preparado por los GAAR durante los tres últimos meses. Es un texto dividido en cuatro apartados, donde se alecciona a todo aquel que se apunte a sabotear Cataluña en los métodos más efectivos para hacer el máximo daño posible. 

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En el texto, los GAAR señalan los objetivos a atacar, los elementos necesarios para llevar a cabo las acciones con la mayor eficacia posible, el radio de actuación recomendado para cada ataque y hasta las pautas necesarias para emprender una huida con seguridad, tras haber llevado a cabo el atentado. Unos ataques que empezarán la noche del 21 de diciembre, pero que se prolongarán (tal y como amenazó el GAAR en su comunicado fundacional) "hasta que se proclame la República". El Cancionero es una especie de libro de estilo de dichos ataques y cuenta con cuatro capítulos: lugares de actuación, configuración de los planes, plan de huida y acciones.

1. Lugares de actuación

Los GAAR ponen en este documento la cruz sobre los lugares a atacar. Señalan "4 puntos estratégicos: el sector de los transportes, el sector energético, los sectores informáticos y de comunicaciones y, por último, las fuerzas del orden.

Los radicales señalan objetivos genéricos y no concretos. Así, cada uno de los saboteadores decidirá dónde atacar. Si opta por reventar la catenaria del tren para provocar el caos en las vías, o si se emplea contra una torre de telecomunicaciones. A gusto del consumidor. Llama la atención que, aunque el manual repite en varias ocasiones que su filosofía es la "no violencia", uno de sus objetivos marcados en rojo son las fuerzas de orden público.

2. Configuración de los planes

Este apartado abarca la parte logística de los ataques. Los radicales dan una serie de recomendaciones a realizar antes de atentar. En primer lugar, ordenan el estudio exhaustivo del lugar que se quiere sabotear, como los accesos, las posibilidades de éxito en la operación, la ubicación de las cámaras y la frecuencia de paso de traseúntes por la zona.

Tras este estudio, proponen materiales para atentar "que sean fáciles de manipular y transportar", así como "buscar lugares para su almacenamiento y dejar allí los materiales necesarios antes del 21-D. También recomiendan atuendo, como ropa oscura y guantes. Para manipular los materiales sin dejar huellas y por el frío. 

Hace especial hincapié el maual en no llevar teléfonos móviles cuando se atente. "Hay que dejar el teléfono móvil encendido en casa, tanto a la hora de preparar la acción como para llevarla a cabo". Pretenden así dificultar el rastreo de los saboteadores por parte de las fuerzas de seguridad. 

3. Plan de huida

¿Y si los pillan? El manual tiene una serie de instrucciones para este supuesto: "Llevar escrito en un papel o en una parte del cuerpo el número de teléfono de asistencia jurídica. Recordad que si nos detienen tenemos derecho a una llamada: hay que exigirla". 

No obstante, hay una serie de pautas previas para evitar los arrestos: "Buscar y valorar las posibilidades de huida, como torrentes, rieras, carreteras adyacentes,  (...) bosques o paradas de metro próxima si la acción se lleva en la ciudad", recoge El Cancionero. Curiosamente los GAAR pretenden atentar contra las infraestructuras de comunicaciones como las vías del tren... pero luego pretenden huir en metro. 

Señalan también la dispersión de los grupos de saboteadores: que cada uno emprenda una ruta distinta tras llevar a cabo el ataque. En caso de que sean grupos, claro, porque los GAAR pueden estar constituidos por una sola persona. También recomiendan llevar ropa limpia para después de llevar a cabo el atentado. 

4. Acciones

El último apartado define el formato de los sabotajes a realizar: "Microacciones con material de fácil colocación y transporte para conseguir nuestros objetivos, ya sea impedir la circulación de vehículos, interferir en la circulación ferroviaria o en el libre movimiento de las mercancías". 

Las actuaciones, por cierto, deben llevarse a cabo cerca de casa. Cada uno en su pueblo: "Se harán en las proximidades de la población o ciudad en la que se haya configurado cada uno de los GAAR. Eso quiere decir que no deben implicar grandes desplazamientos, sino que hará falta adaptar las acciones a lo que se pueda hacer en la proximidad, evitando la utilización de vehículos matriculados"

Cnocluye el documento con un concepto que se repite varias veces en el texto: la no-violencia. UNa muestra más de la manipulación y perversión del lenguaje de los CDR, que entienden que sabotear una región entera, atacar a las fuerzas de seguridad, bloquear a toda la población y sembrar el caos con sabotajes de las líneas eléctricas, las vías y las carreteras... no implica ningún tipo de violencia. 

[Más información: Los GAAR, el brazo ultraviolento de los CDR, llaman a sembrar el caos saboteando Cataluña]

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