Hospital Abente y Lago.
CIG-Saúde denuncia "caos" en el hospital Abente y Lago de A Coruña durante el apagón
Fuentes del Sergas trasladaron al respecto que en el hospital coruñés hubo en todo momento agua embotellada y concretan que alrededor de las 12:30 horas entró a funcionar de manera automática y sin problemas el grupo electrógeno dando cobertura al hospital
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La CIG-Saúde ha denunciado el "caos" vivido en el hospital Abente y Lago de A Coruña durante el apagón histórico de este lunes 28 de abril.
Han advertido de que no hubo luz durante más de seis horas seguidas ni tampoco agua corriente y solicitan que se adopten medidas precisas para que lo ocurrido no se vuelva a repetir. Sobre esto matizan que también se deben depurar responsabilidades.
Critican que mientras la Gerencia de A Coruña pretende transmitirle a la ciudadanía que la situación de los hospitales del área sanitaria fue de “normalidad” con pequeñas incidencias, estas afirmaciones no coinciden con el que vivieron las y los profesionales en esa jornada.
En todo el hospital alegan que solo se disponía de un teléfono en la planta baja, por lo que el resto de las unidades estaban completamente incomunicadas. Además, los sistemas informáticos concretan que no funcionaban “por lo que era imposible acceder a las historias clínicas de las personas enfermas ingresadas”.
La Gerencia, a pesar de que fue informada de estas incidencias, apuntan que no suspendió los ingresos en el hospital, por lo que tuvieron que subir a los pacientes por las escaleras e ingresarlos sin historia clínica.
La CIG-Salud destaca que en este hospital "la mayoría de las personas enfermas tienen una alta dependencia, por lo que necesitan de mucha ayuda para la realización de las actividades básicas de la vida diaria".
Por otra parte, denuncian que las camas quedaron bloqueadas en la posición en la que estaban cuando se produjo el apagón, teniendo el personal que acomodar las personas enfermas “como se pudo”.
Junto a esto, señalan que no había agua en las fuentes, ni en los baños, “y hasta 4 horas después no se suministró agua embotellada”.
"Se garantizó la asistencia sanitaria en todo momento"
Desde la Gerencia de A Coruña han trasladado su reconocimiento y agradecimiento a la profesionalidad y generosidad de los trabajadores del Área Sanitaria en relación con el apagón sufrido a nivel Nacional.
En este sentido, fuentes del Sergas han querido aclarar que "pese a la caída de los sistemas informáticos y de comunicaciones en el Área Sanitaria de A Coruña y Cee se priorizó la atención a los pacientes y se garantizó la asistencia sanitaria en todo momento".
En concreto en el Hospital Abente y Lago, indican que "al igual que en el resto de hospitales, se ingresaron los pacientes que lo necesitaban pese a las dificultades que generó el apagón (4 de tarde y 2 de noche), con el fin de drenar el Servicio de Urgencia Hospitalario del CHUAC y poder atender a los más de 130 pacientes electrodependientes que ingresaron en el mismo, así como el resto de urgencias que acudieron esa tarde y noche".
"Las unidades del Hospital Abente Lago disponían todas de agua embotellada para el consumo de los pacientes y hacer frente a la incidencia surgida", han asegurado las mismas fuentes sanitarias, a la vez que confirman que alrededor de las 12:30 horas, entró a funcionar de manera automática y sin problemas el grupo electrógeno dando cobertura al hospital.
"El equipo estuvo funcionando de manera ininterrumpida y sin cortes aproximadamente hasta las 15:15 horas, momento en el que por un problema técnico en el cuadro general del grupo se produjo una desconexión que afectó al funcionamiento y quedó sin servicio de manera momentánea", aclaran.
"En ese momento personal de mantenimiento que estaba vigilando la instalación detectó un fallo por recalentamiento en el cuadro del grupo y procedió a conectar de nuevo de manera manual", han especificado, a lo que añadieron que "con el fin de garantizar el servicio evitando que se reprodujera el fallo se estableció un nuevo ajuste de cargas de cierta potencia en función de la criticidad (evitando que ningún servicio crítico quedara interrumpido) eliminando de grupo distintas zonas no prioritarias hasta ajustarlo de manera que no hubiera riesgo de fallo".
Una vez ajustado explican que "no constan nuevos fallos en ningún momento hasta que regresó la corriente alrededor de las 2:30 de la madrugada".