María y Luis de la taberna Os Tigres
Ofrecido por:
La taberna de la calle Galera de A Coruña que salvó a Quincemil durante el apagón
Os Tigres recoge el mejor sabor del mar en pleno centro de la ciudad herculina de la mano de Mery y Luis. Quincemil pudo publicar el día del apagón gracias a su WiFi, que siguió funcionando durante horas
Puede interesarte: Bristol, rockeando desde 1995 en la calle Torreiro de A Coruña
"Una taberna gallega sin ninguna pretensión", así describen María Cancela y Luis Chouciño el local ubicado en el número 45 de la calle Galera, en pleno corazón de A Coruña. El título no podría irle mejor a Os Tigres, que el pasado lunes salvó a Quincemil del apagón con su generosidad.
Y es que después de que toda España se quedase sin electricidad, el equipo de Quincemil salió a la calle para contar lo que ocurría en la ciudad. Siempre pegados a la actualidad, los periodistas de este medio recorrieron las calles para saber cómo estaba viviendo la ciudadanía esta insólita situación. Sin embargo, la sede de Quincemil se quedó sin luz e internet, y no había forma ni de subir los vídeos y fotos, ni de publicar las noticias. Pero Os Tigres fueron nuestra salvación.
Tomando el aire en plena calle Galera, uno de los miembros del equipo de Quincemil, habitual de Os Tigres por sus deliciosos torreznos, se dio cuenta de que su móvil se conectaba automáticamente a la WiFi del local, que estaba cerrado.
Viendo que el internet de Os Tigres funcionaba milagrosamente (lo hizo hasta las 15:30 aproximadamente), rápidamente el equipo bajó a trabajar en su terraza, en plena calle. Literalmente Quincemil le robó tomó prestado el WiFi a Os Tigres durante horas, pudiendo así publicar las noticias y vídeos sobre el apagón para los pocos afortunados que pudieron leerlas y verlos.
Mientras algunos conocidos y viandantes se sorprendían de vernos allí, otros llegaron incluso a pedirnos la contraseña para poder chequear el WhatsApp. Al día siguiente, desde Quincemil fuimos a contar y agradecer a María y Luis el favor que nos habían hecho: no se imaginaban que su router contaba con algún tipo de batería o sistema de alimentación propio.
Parte del equipo de Quincemil trabajando en el exterior de Os Tigres.
Un local con sabor a Galicia
Más allá de su generosidad, Os Tigres destaca también por su sabrosa comida. Todo lo que ofrece prescinde de salsas. Aquí el protagonismo lo tiene el producto. "Habla por sí solo", explica María. Navajas, berberechos, mejillones... todo con el auténtico sabor del mar y de la ría.
Estos primos, naturales de Malpica, no podían haber encontrado mejor manera de rendir homenaje a su tierra. La carta entera es un reflejo de la Costa da Morte: tanto en el marisco como en el vino se respira Galicia. Aunque los orígenes de Os Tigres se remontan a 1945, fue en 2013 cuando María y Luis tomaron las riendas del negocio. Primero lo hicieron desde la calle Torreiro y, tras la pandemia, trasladaron el alma del local A Galera, manteniendo intacta la esencia de siempre.
Y como buen marisco, no se entiende sin un buen vino que lo acompañe. La carta de maridaje es otro de los grandes atractivos. La mayoría de sus proveedores son de Malpica, un guiño a sus raíces y una forma de mantener vivo el vínculo con la cultura marinera que los vio crecer. Pero también te puedes encontrar con otros platos como morcilla, ventresca, espárragos, jamón ibérico o cecina al corte.
Mery y Luis, de Os Tigres, en A Coruña
Esa conexión con el mar también se respira en el ambiente. La decoración del local no es casual: algunas puertas están hechas con madera de bateas de mejillón y las paredes están cubiertas con redes de pesca. Además, el arte también tiene su lugar: los murales del ilustrador coruñés Álvaro Dorda y los diseños de Rodrigo Vértebra decoran el espacio de arriba a abajo.
Entrar en Os Tigres es, literalmente, entrar en Galicia. Aunque los mejillones han sido siempre el emblema de la casa, en los últimos años la carta se ha ampliado con propuestas como el jarrete, el jamón asado o los berberechos. Su ubicación, en una de las calles más transitadas de A Coruña, permite que por sus mesas pasen comensales de todos los rincones.
Pero también siguen acudiendo aquellos que un día, cuando eran jóvenes, se tomaban un vino con mejillones en la antigua taberna de Torreiro. Ahora, son sus hijos quienes descubren el sabor de siempre en el nuevo Os Tigres, que María y Luis siguen cuidando con el mismo cariño y devoción con el que empezaron.