La Revolución de los Graneles

La Revolución de los Graneles Quincemil

Economía

Dani, 44 años, propietario de una tienda desde hace 6: "No estoy a disgusto como autónomo, pero hay margen de mejora"

Propietario de 'La Revolución de los Graneles' desde 2019, explica sus pros y contras de ser autónomo

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Dani Rocha recorrió distintos mundos profesionales: desde el periodismo hasta la aviación, pasando por trabajos como freelance en prensa y como redactor o redactor jefe, antes de abrir su propio negocio. En 2019 inauguró La Revolución de los Graneles, hoy instalada en el Mercado de Elviña (A Coruña). Con 44 años, conoce bien lo que implica ser autónomo en España, y en Quincemil hemos hablado con él de ello.

"Me pareció que había llegado el momento de tener mi tienda y apostar por algo en lo que creo", señala. Su historia refleja la de miles de pequeños comerciantes que sostienen el comercio local con esfuerzo y dedicación. Según el Ministerio de Trabajo y Economía Social, en marzo de 2025 había 3.405.992 autónomos en España, 211.648 están en Galicia.

"La casuística no cubre una ausencia de un día"

Uno de sus principales problemas llega cada vez que necesita ausentarse unas horas. "Si tengo una reunión con la profesora de mi hijo o necesito ir al dentista, no puedo cubrirlo". Esto es así porque hace unos años se penalizaron los microcontratos, algo con lo que Dani está de acuerdo.

De esta forma, aquellos contratos que tengan una duración inferior a un mes, además de pagarle su sueldo, su cotización, su seguridad social y el IRPF, tienen un coste fijo de 40 euros a mayores. "Me parece muy bien la medida, pero que se haga con la gente que lo hace tres o cuatro veces. El que usa microcontratos los va a seguir usando", apunta.

El resultado es sencillo: cerrar la tienda. "Me sale más rentable cerrar salvo que prevea un día muy potente. Tendría que hacer un beneficio neto potente solo para quedarme a cero, cosa que yo firmaría, y doy un servicio para no fastidiar a clientes que vienen desde lejos, porque que venga un cliente siempre es de agradecer".

Esa dificultad para ausentarse le condiciona. Durante los años que tuvo la tienda a pie de calle en la avenida de Os Mallos trabajaba a jornada partida. "Eso no era vida", señala. "Estoy totalmente a favor de la reducción de jornada, pero me parece más importante acabar con eso de parar tres horas en mitad del día. Durante cinco años tiré tres horas diarias por la jornada partida".

Ahora abre principalmente de mañana y una tarde a la semana, en total unas 30 horas de apertura, "más todo el trabajo invisible". Y apunta: "No estoy a disgusto como autónomo, pero es obvio que hay mucho margen de mejora".

Cuotas, bajas y la inestabilidad

La subida de cuotas tampoco ayuda. Dani defiende un sistema progresivo, pero critica su falta de agilidad. "En 2025 recalcularon lo de 2023. A lo mejor yo tuve que cerrar la tienda y dos años después me dicen que tengo que pagar más. No estoy de acuerdo".

Las bajas, dice, directamente no son asumibles. Tras una operación en julio, volvió en diez días: "Empiezas a cobrar a partir del tercer día y yo cobraba menos de 20 euros diarios". Sin duda, una cifra con la que nadie puede aguantar ni aunque el nivel de vida fuera más bajo.

"Si estuviera un mes de baja desde el día 1 hasta el día 30, teniendo en cuenta que tengo que seguir pagando la cuota de autónomo, me quedaría en neto... (aún faltaría el IRPF) creo que no llegaba a 300 euros. Con eso tengo que vivir yo, mi negocio, el alquiler y todos los gastos asociados a un negocio", apunta.

Pese a todo, Dani sigue defendiendo su negocio y el comercio local: "La viabilidad de un proyecto no debería verse comprometida por circunstancias ajenas al plan de empresa. Yo pago lo que tenga que pagar, pero si mañana me rompo la pierna y estoy 3 meses cerrado, eso hay que levantarlo. No sé si podría estar 3 meses sin generar y pagando", reflexiona.

¿La solución a todo esto? Dani es consciente de que es complicado y que no existe una fórmula mágica. Incluso, admite que hay veces que el único problema es que un negocio no es rentable. Sin embargo, aunque sea difícil solucionar estos fallos, cree que es algo que tiene que arreglarse sí o sí. "La fuerza de trabajo de los autónomos en España es mucha", sentencia.