Estos son los productos típicos de los pueblos de Galicia que recorre el Camino de Santiago

Visitar Galicia requiere, como mínimo, llevarse alguno de los productos por los que la comunidad es conocida. La gastronomía es el sello de identidad de la región y por buena razón, en cada rincón podemos encontrar un queso, una carne, una bebida o un dulce particular y único.

Una de las mejores formas de recorrer los distintos paisajes de Galicia es realizando el Camino de Santiago. El peregrinaje ha atraído a la esquina noroeste del país a todo tipo de personas con la esperanza de encontrar respuestas visitando los restos del Apóstol. Ya en la Edad Media, cuando comenzó a ganar popularidad, miles de caminantes iban cambiando su dieta mediterránea para acercarse a la inmensidad de la atlántica.

Hay varias rutas que llegan a Compostela, pero el Camino Francés sigue siendo el de mayor popularidad, acogiendo a casi la mitad de los peregrinos que llegan hasta la capital gallega. Este recorre de Este a Oeste la provincia de Lugo y algo de la de A Coruña. Aunque no recorre la costa, sí que tiene municipios cuyo plato estrella viene de la costa. Estos son algunos de los platos más típicos en cada uno de ellos.

Pedrafita de O Cebreiro

Según el Códice Calixtino, el primer documento que sirvió como manual de la peregrinación compostelana, Pedrafita do Cebreiro es la primera parada del Camino en Galicia. Esta localidad destaca por sus curiosas viviendas y por la leyenda de que el Santo Grial podría haberse escondido en una de sus capillas.

Todo peregrino que se precie puede llegar hasta aquí probar la carne de vacuno, casi siempre de ternera rubia gallega, un plato muy típico de esta región. Sin embargo, lo que no se puede perder es el Queso de O Cebreiro.

Este producto se remonta a finales del s.IX cuando en el poblado comenzaron a elaborarlo precisamente para dar a los caminantes. Fue también un queso que, durante el reinado de Carlos II, se despachaba a la Casa Real portuguesa, donde vivía la hermana del Rey, la Reina de Portugal.

Históricamente es elaborado por mujeres de la comarca, habitualmente en invierno para aprovechar las bajas temperaturas (el municipio es conocido por sus paisajes nevados) y así mejorar la conservación.

Sarria

La localidad lucense desde donde muchos eligen comenzar el Camino. Aquí podrás probar muchos tipos de carne, y en muchos locales también te darán a elegir entre algunos de los platos gallegos más típicos, como puede ser el pulpo á feira, la ternera gallega o los pimientos de Padrón. Con todo esta zona destaca por dos productos en concreto: el porco celta y los Santitos.

El sabor de la carne del porco celta es intensa, en parte debido a su particular alimentación a base de bellotas y castañas, así como del sotobosque propio de esta área. De él salen todo tipo de embutidos, como chorizos y chicharrones, además de utilizarse en otros platos como los callos.

Los Santitos, por otra parte, son la galleta típica de Sarria, cuyo proceso de elaboración tiene más de cien años. Son dulces típicos del Día de Todos los Santos y tiene una forma de muñeco con brazos y piernas. Está elaborado a base de azúcar, mantequilla, harina, agua y anís.

Portomarín

A Portomarín se le conocen por varios productos, tanto dulces como salados. Sin embargo, los dos más importantes son el aguardiente y la empanada de anguila.

El aguardiente, aunque típicamente concebida como bebida de pobres al ser creada a partir de la destilación del bagazo de la uva después de fermentar, en los últimos años ha adquirido más prestigio. En el municipio gallego sus orígenes se remontan a los caballeros de la Serenísima Orden de la Alquitara, y se utiliza sobre todo para las queimadas.

Por otra parte, no pueden faltar las empanadas en la ruta de peregrinos. La famosa en Portomarín es la de anguila, que se pescan en el embalse de Belesar, en Chantada, usando la técnica de los "caneiros", mediante la cual se meten los pescados en una especie de jaulas. La tarta de almendras, ligeramente diferente de la de Santiago, es también un plato muy típico de la localidad.

Arzúa

Pocas cosas causan más orgullo a los arzuanos que su queso. A este producto le dedican una de las fiestas gastronómicas más queridas de Galicia en marzo, con actuaciones increíbles y muchas fiestas. el Queso de Arzúa- Ulloa no solo se elabora en esta localidad, sino también en el resto de la comarca, pero es en esta localidad donde se usa en más recetas y platos.

Es un queso de pasta blanda, y que tiene un color blanco ligeramente amarillo, y requiere una maduración de seis días como mínimo. La leche de las vacas gallegas le aporta esa grasa y textura típica mantecosa, perfecta para fundir en todo tipo de platos, y que deja en el paladar sabores que recuerdan a la vainilla, nata y nueces. La denominación de origen ampara varios tipos de modalidad.

Lo ideal, si se busca un plan dulce, es acompañar este queso de membrillo o de miel. Precisamente también en esta comarca son particularmente famosas sus abejas y los productos de miel que producen, así que no costará nada encontrar ambos productos en las tiendas cercanas.

Melide

A punto de llegar a Santiago es cuando los peregrinos comienzan a sentir la euforia, pero sobre todo el cansancio. El cuerpo pide algo contundente, que dé mucha energía para los últimos kilómetros de esta última etapa y en Melide las opciones son de todo tipo.

Primero de todo, si es la primera vez que se está en Galicia, es imprescindible pedir una ración de pulpo á feira. No es mentira eso de que el cefalópodo se cocina y sabe mejor en el interior que en la costa, y este pueblo coruñés es prueba de ello.

Con todo, Melide también es conocida por ser una de las villas más dulces de Galicia. En el municipio podemos encontrar los tres postres típicos: los ricos, los melindres y los almendrados. Los ricos son una galleta dura perfecta para el café, mientras que los melindres son las pequeñas rosquillas de yema con glaseado por encima.

Santiago de Compostela

Por fin, después de unas duras etapas de camino, llegas a Santiago de Compostela. ¿Qué es lo primero que haces? No debería ser ni sacarte una foto en el Obradoiro, ni entrar a ver la Catedral, ni siquiera dejar las mochilas donde quiera que te alojes. Lo primero que deberías hacer es pasar por la rúa del Franco y probar alguna de las muestras de tarta de Santiago que ofrecen las pastelerías de la calle.

Como muchos de los dulces de esta comunidad, este dulce tienen en las almendras un ingrediente elemental. No se conoce mucho de su historia, y de hecho se compara con otros postres ya existentes como la tarta de Elche o incluso la de Portomarín.

Lo que sí se sabe es quien inició la tradición de dibujar la cruz de Santiago encima, y en ese caso hay que agradecer a Casa Mora, que lo lleva haciendo desde comienzos del siglo pasado.

Pero no te quedes solo en el postre. La capital de Galicia es también capital gastronómica y archiconocida por la opciones de restaurantes tanto en el casco histórico como en los barrios. Los verdaderamente interesados en hacerse con los productos gallegos más emblemáticos pueden acercarse al Mercado de Abastos, que también cuenta con un restaurante perfecto para probar alguno de ellos.