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OpSeeker: Inteligencia artificial gallega para tomar buenas decisiones financieras

En OpSeeker llevamos desde 2016 trabajando en cómo utilizar la psicología cognitiva y la tecnología para mejorar la salud financiera de nuestra sociedad. Es nuestra pasión y nuestra razón de ser.
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¡NO SOMOS RACIONALES!

Bueno, no voy a ser tan radical… ¡NO SIEMPRE SOMOS RACIONALES! 

Si entendemos la racionalidad como ser capaces de tomar las decisiones que maximizan una variable (bienestar, utilidad, valor esperado…), el ser humano no es siempre racional. Muchos de nosotros comemos más de la cuenta, bebemos demasiado, fumamos… es decir, tomamos decisiones que afectan negativamente a las variables anteriormente mencionadas.

Uno de los primeros en darse cuenta de esto fue Herbert Simon, que habló del concepto de “racionalidad limitada”. Herbert, que por cierto le dieron el premio Nobel, explicó que el ser humano no conoce su realidad al 100% ya que tiene una capacidad cognitiva muy limitada. Pero los economistas de la época fueron capaces de adaptar sus teorías, que describían al ser humano como un ente racional llamado “Homos Economicus”, a los descubrimientos de Herbert. Lo que refutaron es que, a pesar de que los humanos no tomasen siempre la decisión racional debido a su racionalidad limitada, lo que sí que se podía decir es que en promedio los seres humanos eran racionales, ya que los errores causados por esta racionalidad limitada se cancelarían al ser completamente aleatorios.

Kahneman, Tversky y los sistemas de pensamiento

Kahneman y Tversky (el primero Nobel, el segundo no, por su pronto fallecimiento) consiguieron demostrar a través del concepto del sistema 1 y sistema 2 de pensamiento, y de las heurísticas, que los errores en los que caen los seres humanos a la hora de tomar decisiones son predecibles. Es decir, comenzaron a demostrar que los economistas no estaban en lo cierto al decir que el agregado de los seres humanos toma las decisiones racionalmente ya que los errores no son aleatorios, sino que son consecuencia de variables explicativas en la función de toma de decisión.

Si os parece complicado, es mi incapacidad de comunicar mejor, así que voy a intentar ponerlo de la manera más clara posible. Amos y Daniel (Tversky y Kahneman) nos iluminaron con lo siguiente:

  1. Existen dos sistemas de pensamiento, el 1 y el 2
    1. El 1 es el automático. Este sistema no está controlado por la razón, no nos requiere esfuerzo, es asociativo, rápido, inconsciente. 
    2. El 2 es el reflexivo. Está controlado por nuestra razón, consume gran parte de los recursos de nuestro cerebro y es lento y autoconsciente.
  2. El sistema 1 es el responsable de que hayamos podido sobrevivir tantos años. Es un concepto sencillo: hace 500.000 años los Homo Sapiens vivían en la tierra y convivían con muchas especies que podían poner sus vidas en riesgo si no actuaban rápido y apropiadamente en determinados momentos. Por esto, nuestro cuerpo, pero sobre todo nuestra mente, se adaptó a tener que tomar estas decisiones rápidas y suficientemente buenas para sobrevivir. 
  3. Este sistema 1 utiliza las heurísticas para tomar decisiones suficientemente buenas. Es decir, estas heurísticas no hacen que tomemos la mejor decisión, sino que tomemos una decisión que está suficientemente bien. Estas heurísticas son rápidas referencias mentales que nuestro cerebro usa para tomar decisiones en momentos en los que ya sea por falta de capacidad, por incertidumbre, por riesgo, o por falta de necesidad, no estamos involucrando a la razón en la decisión.

¿Por qué puede ser peligroso decidir desde el Sistema 1?

El punto fuerte del Sistema 1 es al mismo tiempo su mayor debilidad. Es cierto que para la mayoría de las decisiones de nuestro día a día, el sistema 1 es fantástico, ya que, entre otras cosas no consume nuestra capacidad cognitiva. ¡Si estuviésemos siempre tomando decisiones desde nuestro Sistema 2 se nos apagaría el cerebro por sobrecarga! Pero, para otras muchas decisiones, aquellas en las que tenemos que pensar más allá del aquí y ahora, el Sistema 1 puede reportarnos situaciones muy peligrosas

En temas de salud financiera este problema se manifiesta en muchas situaciones. La mayoría de las heurísticas, las reglas rápidas de toma de decisiones antes mencionadas, hacen que seamos muy malos gestionando el dinero. Por ejemplo:

  1. Preferimos gastarnos nuestro dinero ahora en el placer del presente, aunque ese placer sea mucho menor que el que podamos conseguir en un futuro si esperamos un tiempo y ahorramos o invertimos ese dinero (a esto se le llama descuento hiperbólico, muy relacionado con el sesgo de presente). 
  1. Cuando invertimos nos cuesta mucho vender acciones que pierden y dejar que corran las acciones que van ganando (es decir, vendemos muy pronto nuestros ganadores y aguantamos mucho a nuestros perdedores y lo hacemos por la aversión a la pérdida concepto asociado a la Teoría Prospectiva – Teoría por la que Kahneman fue reconocido con el Nobel).

¿Y OpSeeker, dónde entra en todo esto?

OpSeeker se dedica a unir tecnología y las ciencias de comportamiento (las que estudian todos los elementos que afectan a la toma de decisiones de los seres humanos y donde se encuentra la economía conductual) para ayudar a las personas a generar mejores hábitos financieros y así mejorar su salud financiera.

Para entender cómo lo hacemos hay que entender el concepto de sesgo. Los sesgos son los errores cognitivos y emocionales causa de las heurísticas del Sistema 1, de nuestra falta de capacidad cognitiva y del efecto que tienen las emociones en nuestro juicio. También hay que entender el concepto de “Nudge”, creado por Richard Thaler, otro premio Nobel. Un nudge es un pequeño empujón y se utiliza en el contexto de ayudar a las personas a tomar las decisiones adecuadas introduciendo elementos en sus tomas de decisiones que les encaminen hacia estas decisiones.

Nuestro trabajo es justamente este, hacer nudges para conseguir que las personas tengan mejores hábitos financieros

Nuestro uso de la inteligencia artificial

Creo que ya ha quedado muy claro cómo usamos la economía del comportamiento, pero ¿y la tecnología?

Lo cierto es que estos sesgos y nudges de los que hablamos no siempre funcionan de la misma manera y con la misma intensidad en todo el mundo, hay muchos factores que afectan y marcan qué tipo de sesgos y nudges van a tener un mayor impacto en las personas: perfil psicológico, edad, país, religión… es por esto que la tecnología es clave a la hora de ayudarnos a perfilar muy bien a las personas antes de entender sus sesgos y trabajar en nudges.

Nosotros estamos creando un “cerebro” que sea capaz de perfilar al usuario mediante una serie de interacciones con nuestro chatbot y que mediante el uso de inteligencia artificial sea capaz de entender cuál es la mejor manera para conseguir que este usuario tome mejores decisiones financieras. 

Hemos trabajado (y con algunas seguimos trabajando) con grandes instituciones financieras españolas y extranjeras como Mapfre, Santa Lucía, Bankia, BBVA, Rabobank ayudándoles a, no solo entender mejor a sus clientes y potenciales clientes mediante el uso de la economía conductual y la tecnología, sino también a mejorar su salud financiera. Porque, aunque a muchos les cueste verlo, las instituciones financieras se están transformando y están intentando poner al cliente y sus necesidades en el centro de sus procesos, tarea tremendamente complicada por las estructuras actuales de las mismas.

Gonzalo Camiña Ceballos
CEO de OpSeeker
Linkedin - https://www.linkedin.com/in/gonzalocaminaceballos/

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