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Vecinos del edificio okupado en la Ronda de Nelle de A Coruña claman contra la inseguridad

Una persona fue detenida el pasado lunes en este inmueble por una presunta agresión sexual. Los residentes en la zona denuncian robos, suciedad y caída de ventanas
Protesta vecinal frente al edificio okupa de la Ronda de Nelle, a 6 de septiembre de 2023.
@EloyTP
Protesta vecinal frente al edificio okupa de la Ronda de Nelle, a 6 de septiembre de 2023.
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Decenas de personas se han concentrado este miércoles frente al edificio okupado de la Ronda de Nelle de A Coruña para clamar contra la inseguridad y la insalubridad que soportan. El inmueble, ubicado en el número 120, es sido foco de las quejas y críticas de los residentes en la zona.

La manifestación fue convocada con el objetivo de visibilizar los problemas que enfrentan los residentes desde hace años y exigir una solución. Robos, acumulación de basura, caída de ventanas o actos violentos son algunas de las circunstancias que denuncian sufrir los vecinos de este edificio.

Precisamente, un hombre fue detenido el lunes en el inmueble por una presunta agresión sexual ocurrida el pasado mes de agosto. Otras dos personas fueron detenidas por la misma razón en la vía pública. Todos ellos han pasado a disposición judicial y la investigación sigue abierta.

Esta no es la primera ocasión en la que se produce una detención en este edificio. El pasado mes de marzo, un hombre fue detenido por violencia de género. El varón tenía orden de alejamiento de la víctima, una mujer de 19 años que presentaba marcas en el cuello derivadas de la agresión.

Este tipo de circunstancias se suman a otras que ponen en peligro a viandantes y residentes. La caída de una ventana a la calle ponía en alerta a los vecinos el pasado mes de agosto: "Es la tercera vez que cae una ventana y cualquier día mata a alguien y tenemos una desgracia"

Todo ello a los problemas de insalubridad que denuncian los vecinos. Dos camiones del servicio de limpieza retiraron en mayo la basura acumulada en el patio del edifico okupado al que, según un comerciante, "llegaron a arrojar incluso heces".

La situación ha empeorado, además, para las personas que tienen negocios. "Están robando por la zona y me he visto obligada a trabajar puerta cerrada", aseguraba a Quincemil una de las afectadas en abril.

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