4 febrero, 2023 02:19

Cuando hace poco más de un año, en una nota emitida por Zarzuela en formato de comunicado oficial, el Rey Emérito anunciaba su firme decisión de establecer su residencia de manera definitiva en Abu Dabi, dentro de la Casa de su Majestad el Rey se pusieron en modo alerta. La razón de esta inquietud venía porque, a pesar de que el texto distribuido por el departamento de comunicación de la jefatura del Estado, hablaba de que Juan Carlos tomaba esta decisión por su propia voluntad. En las tertulias y los foros de opinión se daba por supuesto que el hijo obligaba al padre a marcharse de forma permanente lejos de su familia por el bien de la institución.

"Durante esos días se escuchó de todo, pero lo peor fue oír hablar a sus supuestos grandes amigos que aseguraban que le habían roto el corazón porque le estaban obligando, como poco, a morir en el exilio, lejos del país por el que había dado la vida", comenta a EL ESPAÑOL | Porfolio una persona cercana al equipo de Felipe VI. "Pero, pasado el tiempo, los hechos y las acciones de Juan Carlos han dejado claro que las cosas no eran así, que el lobo no es malo ni el cordero blanco e inmaculado", sentencia.

La fuente, se refiere a la noticia que saltó hace una semana en la que el padre del Monarca actual anunciaba su intención a la Agencia Tributaria española de iniciar los trámites administrativos para dejar constancia fiscal de su condición de "no residente" en España y estar exento, por lo tanto, de rendir cuentas a la Hacienda española.

Una imagen de Juan Carlos I en Abu Dabi.

Una imagen de Juan Carlos I en Abu Dabi.

Esto es algo muy habitual entre los deportistas de élite y, desde que aparecieron en el panorama popular, también hacen lo mismo los aclamados youtubers. Campeones como el piloto de Moto GP Joan Mir, el tenista Novak Djokovic, el exciclista Joaquim Purito Rodríguez o la ya retirada tenista Arantxa Sánchez Vicario tienen en común con el Emérito el hecho de haber fijado su residencia fiscal en un país que no es el suyo de nacimiento.

Entre los youtuber el caso más famoso de huida de la Agencia Tributaria española lo protagonizó hace unos meses El Rubius, el español más famoso en las redes sociales, que trasladó su residencia a Andorra debido a las ventajas fiscales que le ofrecía. Rubén Doblas, que es su nombre real, daba como argumento a todos sus seguidores que "todos sus amigos estaban allí". Sin embargo, la razón es más sencilla: en el país vecino está pagando menos impuestos que en España.

[Ibai Llanos vs. El Rubius: el youtuber patriota que paga impuestos aquí frente al 'andorrano']

La razón que Juan Carlos ha dado a Hacienda para fijar su residencia fiscal en Abu Dabi, donde reside desde agosto de 2020, es parecida a la que El Rubius dio a sus followers por su canal. Según los abogados del padre de Felipe VI "ya no radica en España el núcleo principal o a la base de sus actividades o intereses económicos, tal y como establece la normativa española para otorgar la residencia fiscal a un ciudadano, y se convierte a todos los efectos en contribuyente en los Emiratos Árabes Unidos". "Vamos, como cualquier influencer o deportista famoso, pero sin moverse. Aunque en su caso es distinto, él no quiere que Hacienda le quite lo vaya a ganar en el futuro, sino que revisen lo que ya tiene. Ahí está la diferencia", comenta la misma persona.

Varias personas cercanas al padre del Rey han comentado a este diario que la decisión de cambiar su residencia fiscal a Abu Dabi la tomó después de que la Fiscalía General del Estado archivara las investigaciones por sus presuntas irregularidades y tras pagar dos regularizaciones que le obligaron a ingresar en la caja de Hacienda más de cinco millones de euros, de esto hace justo un año. Entonces el abogado del Rey Emérito, Javier Sánchez-Junco, informó que su cliente había abonado a la autoridad tributaria alrededor de 4,4 millones de euros en compensación por el uso de unos ocho millones de euros en viajes. Éstos fueron abonados por la Fundación Zagatka, propiedad de su primo lejano Álvaro de Orleans, pero Juan Carlos nunca tributó por el uso de dichos fondos.

El rey emérito camina con ayuda en el puerto de Abu Dabi.

El rey emérito camina con ayuda en el puerto de Abu Dabi. Viva la vida.

Pedir dinero

"Te recuerdo que tuvo que pedir dinero a varios amigos porque no tenía cash suficiente. Alicia Koplowitz, Alejandro Aznar, Jaime Castellanos, los Corsini… pagaron su deuda con el fisco y no quiere volver a encontrarse con algo de esto. Piensa que es un pobre jubilado", añade, entre risas. "Así que ha quedado claro que la razón fundamental por la que Juan Carlos eligió autoexiliarse en Abu Dabi es, precisamente, la de disfrutar de las condiciones fiscales del emirato donde no existe el impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), ni se pagan impuestos por los rendimientos de capital. ¿A que ahora lo entiendes? Su hijo no le ha mandado a ningún exilio forzoso ni es tan malo en este cuento", dice.

Según se publicó entonces, los empresarios que habrían aportado fondos para financiar esa deuda del anterior jefe del Estado serían los hermanos Miguel y Javier Corsini, expresidente de Renfe y gestor de fincas de caza, respectivamente, que habrían sido los organizadores de la colecta; Félix Sanz Roldán, exdirector del CNI y hoy asesor de Iberdrola; Vicente Boluda; Alejandro Aznar, presidente de la bodega Marqués de Riscal y gestor de fincas de caza donde Juan Carlos ha acudido en muchas ocasiones; Alicia Koplowitz, empresaria y mecenas cultural; Diego del Alcázar, presidente del Instituto de Empresa Business School; Jaime Castellanos, empresario de medios de comunicación y del sector asegurado además de ser tío de Ana Botín, presidenta del Banco Santander. Cada uno de ellos habría aportado alrededor de 250.000 euros.

[Juan Carlos ya teme una muerte como la de su cuñado Constantino: "Nadie se plantea un funeral de Estado para él"]

Esta decisión de establecer su residencia fiscal en Abu Dabi coincide justo con su mudanza a su nueva casa en el emirato. Se trata de una mansión construida especialmente para él, a la que ya ha trasladado sus efectos personales que permanecían, en su mayoría, en el Palacio de la Zarzuela en Madrid, a pesar de llevar en el país árabe desde hace casi tres años. Se trata de un nuevo hogar, fuera de la isla de Nurua, donde ha estado hasta hace unas semanas.

"No le gustaba nada estar tan aislado. Lo de coger el barquito para ir a cualquier sitio, incluso cuando estuvo con Covid y tuvo que ir al hospital en barco, no le hacía ninguna gracia. Ahora está en su propia casa con sus cosas, incluidos todos los recuerdos que no quiere tenerlos lejos. Además, en estos momentos tiene la compañía de su nieto [Froilán] que le está dando la vida. Abuelo y nieto se llevan de maravilla. No es cierto que el joven vaya a quedarse allí a vivir, pero por ahora pasará una temporada", asegura un amigo íntimo de Juan Carlos.

El hijo de la infanta Elena, en un montaje.

El hijo de la infanta Elena, en un montaje.

"Pero su deseo de volver a España, aunque sea sólo de visita sigue en pie y prepara, con total secretismo, su próximo desplazamiento para que no se frustre. De momento, está ilusionado con el cambio de su actual residencia, situada en el barrio residencial de Al Bateen. Quiere dejar de ser un huésped en su propio hogar", añade.

En Zarzuela, la política respecto al anterior monarca sigue siendo igual. A pesar del beso robado entre padre e hijo durante el entierro de Constantino de Grecia en Tatoi (Atenas) nada cambia con esta decisión del Emérito de establecer su residencia fiscal en Abu Dabi. "Y don Juan Carlos es consciente de que en la Casa es donde existe un mayor interés en que permanezca lejos y alejado de la atención pública. Es cierto que el actual Gobierno es especialmente beligerante contra su figura y el pasado reciente de Juan Carlos, pero la postura de Felipe VI respecto a su padre, aún sacrificando y haciendo daño a las relaciones familiares, no va a cambiar en el caso de que Alberto Núñez Feijóo llegue a la Moncloa. Sólo el tiempo dirá si es posible un regreso del Jefe para evitar la que es su peor pesadilla: morir lejos de España", termina esta fuente cercana al equipo del actual jefe del Estado.