Los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro son indudablemente el evento deportivo más importante del año. Sin embargo, los espectadores que siguen las competiciones a través de Televisión Española ya no saben si están viendo el partido, carrera o combate en directo o con retraso, si es que tienen la suerte de que sea retransmitido. Entre los fallos más clamorosos cometidos por la cadena pública se encuentran diferidos vendidos como directos, cortes de partidos antes de su conclusión y la ausencia de competiciones clave con presencia española.

Esta cobertura deficiente por parte de la televisión encargada de retransmitir los juegos es especialmente chocante, ya que TVE tiene dos cadenas volcadas en la programación olímpica, la 1 y Teledeporte, además de 129 profesionales en Río. La situación ha llegado a tal punto que hasta los propios deportistas se han sumado a las críticas: el taekwondista Joel González, medalla de oro en Londres 2012, avisó a sus seguidores en Twitter del horario del combate, especificando que en España será a las 17:15 horas "si RTVE quiere que salga en directo”.

Resulta lamentable que los errores de TVE priven a los españoles del placer de ver a sus deportistas competir en directo. El director de la cadena, Eladio Jareño, debe garantizar que el resto de la programación se ajuste al estándar que merecen los espectadores.