Unos trabajadores instalan un mural del expresidente cubano para la exposición por su 90 cumpleaños.

Unos trabajadores instalan un mural del expresidente cubano para la exposición por su 90 cumpleaños. Reuters

América

Cuba celebra el 90 cumpleaños del expresidente Fidel Castro

El azote del 'imperialismo yanqui' ha agradecido las muestras de cariño de los cubanos y ha aprovechado para reivindicar su rol como artífice de la revolución cubana.

13 agosto, 2016 15:48

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El Malecón habanero amanecía este sábado con la resaca de la intensa celebración del 90 cumpleaños del expresidente cubano, Fidel Castro, y con los asistentes alejándose de la tormenta eléctrica que se cernía sobre la playa. 

"¡90 años han pasado y a por otros 90!", exclamó Leydis Campos, una bailarina de 25 años que asistió al acto honorífico del icono de la revolución cubana. "Esta es el mejor regalo que podemos hacerle, esta fiesta", dijo según Reuters.

El expresidente, retirado del poder por problemas de salud desde hace una década, ha agradecido las muestras de cariño a través de una misiva en el órgano portavoz del Partido Comunista de Cuba, Granma, donde ha aprovechado y se ha reivindicado como el artífice de la revolución cubana ante el "desconcierto" de los partidos de masas. 

"Deseo expresar mi más profunda gratitud por las muestras de respeto, los saludos y los obsequios que he recibido en estos días, que me dan fuerzas para reciprocar a través de ideas que trasmitiré a los militantes de nuestro Partido y a los organismos pertinentes", escribe Castro, quien realiza un breve repaso a su infancia desde su nacimiento en Birán, este de Cuba, y su relación con su padre, Ángel. "Pocos años antes del triunfo de la revolución mi padre murió. Antes, sufrió bastante", recuerda Castro.

Varias mujeres conversan en el Malecón habanero antes de bailar en el desfile en honor a Castro.

Varias mujeres conversan en el Malecón habanero antes de bailar en el desfile en honor a Castro. Reuters

Pero el desfile en su honor no es el único regalo que ha recibido. El portal digital oficial Cubadebate y la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI) ha querido homenajear al exmandatario con el lanzamiento de una página web que recoge su vida, escritos y discursos junto con fotografías inéditas y otros documentos. Con el título "Fidel, soldado de las ideas", la página abre con una cita que el expresidente venezolano, Hugo Chávez, pronunció el 13 de agosto de 2001, en el 75 cumpleaños de Castro: "Fidel no le pertenece solo a Cuba, les pertenece a este mundo nuestro, a esta América nuestra. Después de casi medio siglo de lucha, Fidel les puede mostrar la cara con integridad plena y con moral absoluta, no solo al pueblo cubano, sino a todos los pueblos del mundo".

Un llamado a preservar la paz

Además, a través de un artículo titulado "El cumpleaños" en el portal oficial Cubadebate ha hecho un llamado a preservar la paz y alerta de que "la especie humana se enfrenta al mayor riesgo de su historia".

"Hay que martillar sobre la necesidad de preservar la paz, y que ninguna potencia se tome el derecho de matar a millones de seres humanos", escribió el líder de la revolución cubana.Castro aborda en este nuevo escrito cuestiones como el problema de la superpoblación mundial, las armas nucleares, los intentos de Estados Unidos de liquidarlo y la importancia de la educación, pero también se remonta en tono nostálgico a episodios de su infancia.

Un año y medio después del comienzo del histórico proceso de deshielo diplomático entre Cuba y EEUU, Fidel Castro considera que al discurso del presidente estadounidense, Barack Obama, "le faltó altura" en su visita a Japón en mayo pasado.
"(...) Le faltaron palabras para excusarse por la matanza de cientos de miles de personas en Hiroshima, a pesar de que conocía los efectos de la bomba (atómica lanzada por Estados Unidos sobre esa población en 1945)", sostiene Castro.
Y agrega: "Fue igualmente criminal el ataque a Nagasaki, ciudad que los dueños de la vida escogieron al azar. Es por eso que hay que martillar sobre la necesidad de preservar la paz, y que ninguna potencia se tome el derecho de matar a millones de seres humanos".

El azote del 'imperialismo yanki' 

En sus 90 años, Castro ha burlado más de 600 complots para acabar con él orquestados por una CIA, la agencia de inteligencia estadounidense, obsesionada con borrarle del mapa.

Fidel Castro, azote por décadas del 'imperialismo yanqui', se convirtió desde los inicios de la revolución que triunfó en 1959, en un hueso para EEUU y la principal amenaza a sus intereses en América Latina, donde el líder cubano apoyó movimientos de izquierda y guerrillas de inspiración comunista en las trincheras de la Guerra Fría, consigna Efe.

Raúl y Fidel Castro junto a René Ramos Latour.

Raúl y Fidel Castro junto a René Ramos Latour.

Un listado que incluye al menos 638 atentados entre 1958 y 2000 de los que los servicios secretos cubanos tuvieron constancia, 167 de los cuales estaban en avanzada fase de ejecución en el momento de ser desmantelados.

Entre ellos figuran planes altamente rocambolescos, más propios de películas de espías como James Bond o la Pantera Rosa, que de los todopoderosos servicios de inteligencia de EE UU, que llegaron a crear el departamento ZR/Rifle con la única misión de liquidar a Castro, en colaboración con la mafia para añadir un toque hollywoodiense al asunto.

En los albores de la revolución, Fidel acudió a la Asamblea General de la ONU en Nueva York en 1960, ocasión que la CIA quiso aprovechar para matarlo con varias ideas como colocar explosivos en los puros que se brindarían al comandante, una misión que finalmente no llegó a concretarse. Tras la fallida invasión de la Bahía de Cochinos (por exiliados anticastristas financiados por EE UU), los servicios de inteligencia se ufanaron en idear una desaparición limpia y sin rastro de sangre de Fidel Castro, con el envenenamiento como opción predilecta, operación que contó con la participación expresa de mafiosos como John Rosselli y Santos Traficante Jr.

Ellos se ocuparon de conseguir las cápsulas de cianuro que entregaron en 1963 al camarero de la cafetería del Hotel Habana Libre, donde Fidel acudía frecuentemente a tomar un batido. Fue otro fracaso: la cápsula de cianuro quedó adherida al hielo del congelador donde estaba guardada y no pudo utilizarse; el atentado que más cerca estuvo de tener éxito, aunque el azar salvó de nuevo la vida del líder cubano.