Jan Huitema, miembro del Parlamento Europeo, ha trabajado en su granja familiar.

Jan Huitema, miembro del Parlamento Europeo, ha trabajado en su granja familiar. instagram.com/janhuitema

Motor COCHES

Jan, el granjero (y político) con 130 vacas que quiere que conduzcas (cuanto antes) un coche eléctrico

15 mayo, 2022 09:33

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Se llama Jan y se apellida Huitema. Es más que probable que su nombre no le suene de nada. Sin embargo, en la industria del automóvil sí se conocen sus intenciones. Entre otras razones porque Jan es uno de los más fervientes abanderados del coche eléctrico en Europa y de prohibir los coches de combustión lo antes posible.

Nacido en los Países Bajos, hace 38 años, Jan es hijo de un productor lechero. Estudió veterinaria para trabajar en la granja familiar, que cuenta con 130 vacas, según el mismo describe en sus perfiles de internet. Si bien Jan estaba centrado en las labores del campo; también le interesaba la política.

De ahí que tuviera intención de trabajar en Bruselas. Primero como asesor de parlamentarios. Y después, desde 2014, como europarlamentario por el Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD).

Desde entonces, Jan participa activamente en la comisión de medioambiente y comité de agricultura del Parlamento Europeo. Y precisamente este puesto es el que ha llevado a Jan a hablar del coche eléctrico y de la prohibición del motor de combustión en los últimos días en Europa.

Fin del motor de combustión

En concreto, fue el pasado miércoles cuando la Eurocámara, por medio de la Comisión de Medio Ambiente, votaba acelerar la llegada del coche eléctrico, gracias a una propuesta iniciada por, entre otros, Jan. 

Lo que se votaba era la revisión del reglamento de turismos y vehículos comerciales. Un reglamento que inicialmente fijaba para 2040 el fin de los coches con motor de combustión, es decir, el adiós definitivo a los coches de gasolina, diésel, híbridos e híbridos enchufables.

A pesar de que Huitema no tiene experiencia en la industria del automóvil, su postura está muy definida: "este reglamento pretende regular la cantidad de CO2 que pueden emitir los coches; estamos intentando garantizar que para 2035 todos los nuevos coches que se vendan no emitan ya CO2; esto significa que los coches deben ser eléctricos o funcionar con hidrógeno", afirma.

Un calendario más estricto

Finalmente, esta reducción de 2040 a 2035 del motor de combustión, fue aprobada el pasado miércoles en el Parlamento, gracias a la propuesta de Jan, entre otros. Este fue el primer paso, pero todavía no es el definitivo. Ahora, por tanto, falta votarlo en pleno para que quede constancia de la postura del Parlamento. Eso será el 5 junio. Después se tendrá que negociar con el Consejo (los estados miembros).

Sin embargo, la propuesta que a Jan no le salió tan bien fue la de fijar un calendario todavía más restrictivo de aquí a 2030. En este sentido, Jan quería que en lugar de una reducción prevista para 2035 del 55% de las emisiones respecto a 1990, esta disminución fuera del 70%, petición que finalmente fue rechazada.

No todos quieren una transición rápida

Entre los parlamentarios europeos, una de las personas que no está de acuerdo con el endurecimiento de esta norma es Susana Solís, eurodiputada de Ciudadanos, que votó en contra de este adelanto.

Si bien Jan Huitema no tiene experiencia en la industria del automóvil, Susana sí ha trabajado para Mercedes, Bosch, además de otras compañías como Johnson y Johnson. Esta eurodiputada, por tanto, sí sabe lo que hay detrás de la industria del automóvil y de las cadenas de producción.

"Cambiar una línea de producción lleva siete años. Los fabricantes necesitan flexibilidad y certidumbre para planificar su descarbonización, sus inversiones para los objetivos del 2030 y 2035. Es una situación insostenible para la industria, que no puede reinventarse de la noche a la mañana: hay que asegurar que la transición ecológica sea viable sin sacrificar empleos por el camino", afirma Susana.

Miles de empleos en peligro

Lo cierto es que directivos como Luca De Meo, CEO del Grupo Renault, ya han adelantado que estas nuevas regulaciones sobre emisiones de la Unión Europea supondrán el recorte de empleos de 70.000 personas solo en Francia.

Según De Meo las nuevas reglas afectarán a los fabricantes de vehículos, haciendo que los coches sean más caros, implicarán mayores costes por inversiones y, en última instancia, repercutirán en la demanda de los consumidores.

"Queremos asegurarnos de que la gente se pueda permitir comprar nuevos vehículos asequibles. Si no ralentizamos las regulaciones, la gente se seguirá comprando coches usados y mantendrá los coches viejos en circulación", ha alertado De Meo.

Asimismo, también el CEO del Grupo Stellantis, Carlos Tavares, también ha señalado recientemente que en 2025 es más que probable que no haya baterías suficientes para todos los coches que se van a producir, lo que implicará una mayor dependencia de Asia.

El coche eléctrico… ¿solo para ricos?

Precisamente, este hecho de que los coches eléctricos sean más caros y la infraestructura de recarga esté más desarrollada en los países del norte, deja entrever que el coche eléctrico, hoy en día, está destinado principalmente a aquellos europeos con mayores rentas.

En este sentido, actualmente existen dos 'europas' en el coche de cero emisiones o, al menos, dos velocidades en la instauración de este tipo de vehículos. Por un lado, está la Europa del Norte, donde el coche eléctrico tiene mayor cuota, viaja a mayor velocidad y se corresponde con los países que tienen una renta per cápita más alta.

Y por otro lado está la Europa del sur, con una menor penetración del coche eléctrico y una riqueza inferior por parte de los habitantes. En este sentido, entre los países con mayor cuota de mercado según datos de 2020 son Suecia, Dinamarca, Países Bajos, Finlandia, Alemania…

Estos países, tienen una media de PIB per cápita de 45.612 euros, una cifra que casi dobla al PIB per cápita de España que es de 23.700 euros.

Esto se traduce en que los países nórdicos, la cuota de mercado de los eléctricos supera en algunos casos el 30%, si bien en España en lo que llevamos de 2022 la cuota de eléctricos puros es del 3,9%. En 2020, la cuota de ventas de eléctricos en Europa fue del 11%.

Una situación que podría agravarse en España puesto que en la Eurocámara ya se está debatiendo eliminar las subvenciones para vehículos eléctricos al considerar que ya no cumple el propósito original (en España estas ayudas con el Plan Moves están garantizadas hasta 2023).

¿Qué dicen los fabricantes de coches?

Según recoge Europa Press, la patronal española de los fabricantes de coches (Anfac) señala que si finalmente se aprueba la decisión de reducir al 100% las emisiones de los vehículos para 2035, esta decisión debe "venir acompañada de nuevas herramientas al mismo nivel de exigencia si se quiere que su cumplimiento sea posible".

Por ello, ha propuesto diferentes medidas como el despliegue de puntos de recarga, con nuevos objetivos "ambiciosos pero vinculantes" y una mesa de gobernanza operativa; una fiscalidad que apoye positivamente la descarbonización y se centre en gravar el uso, no en la compra; y una reforma de los planes de ayuda a la demanda para hacerlos más eficaces.

En esta línea, Anfac apuntó que si finalmente el Gobierno español decide apoyar una nueva aceleración de los objetivos "estas nuevas medidas son incluso mucho más necesarias y urgentes". 

Si no se adoptan la industria automovilística española y el empleo "pueden enfrentarse a un serio problema dada la gran exigencia de los nuevos objetivos que se pretenden aprobar", han señalado.

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