
Imágenes relacionadas con el crimen de Richard.
Detenido el autor material del crimen de Richard, el cura de Boston asesinado en un piso turístico de Málaga
Según las pesquisas, los investigados siguieron al religioso hasta su lugar de hospedaje donde fue abordado al acceder al inmueble; con el trasfondo del robo, la víctima falleció a causa de una acción de “asfixia mecánica por sofocación”.
Más información: Un sacerdote de Massachusetts con "espíritu aventurero": así era el octogenario hallado sin vida en un piso turístico de Málaga
Richard había llegado a Málaga para coger un crucero, pero no sabía que su vida iba a acabar horas después en el pequeño piso turístico que había reservado en la calle Viento del Centro de la ciudad. Allí, este octogenario fue hallado sin vida con evidentes signos de violencia y sin ninguna de sus pertenencias. Sufrió un fuerte golpe en la cabeza. Era 20 de enero. Pero no ha sido hasta marzo cuando se ha conocido que el autor material de los hechos, un hombre español, pero con nacionalidad francesa, de 40 años, ha sido arrestado este martes en Sevilla. Su cómplice, un magrebí, de 27, permanece en prisión desde febrero tras ser arrestado el 31 de enero por los delitos de homicidio y robo con violencia.
Según la investigación, los investigados siguieron al religioso, el cual había llegado de vacaciones y quien, tras apearse de un taxi, fue seguido hasta su lugar de alojamiento, en la calle Viento, por la zona de La Goleta, donde fue abordado al acceder al inmueble de manera sorpresiva por uno de los sospechosos; el segundo de ellos, en labores de vigilancia, dio cobertura a su compinche.
Del resultado de la autopsia y la propia investigación de los hechos, la Policía Nacional concluía que la causa de la muerte se produjo por “asfixia mecánica por sofocación”. Según fuentes policiales, uno de los detenidos usó una gran violencia ante la resistencia de la víctima, y comprimiendo sus vías respiratorias hasta causarle la muerte.
Inmediatamente después, los responsables del crimen huyeron del lugar con las pertenencias del octogenario, incluida su maleta. El Grupo de Homicidios iniciaba así una ardua investigación, que ha llevado aparejado, entre otras diligencias complementarias, el visionado de una ingente cantidad de imágenes recogidas por unas 80 cámaras de establecimientos y las propias del Ayuntamiento de Málaga, permitiendo la identificación y posterior detención, el pasado día 31 de enero, de un ciudadano magrebí de 27 años, considerado cómplice en el asesinato.
Continuando con las averiguaciones, la Policía Nacional logró poner nombre y apellidos al otro de los implicados, de nacionalidad francesa. Ante el riesgo de fuga, la autoridad judicial decretaba una Orden Europea de Detención y Entrega que instaba a su arresto, siendo localizado y puesto a disposición judicial ayer en Sevilla.
Una vecina de la calle Viento, donde ocurrieron los hechos, relató la semana del suceso que escuchó sobre las 20.30 horas del 20 de enero a un hombre "gritando, como si lo estuvieran matando". Poco después se hizo el silencio. Aunque la Policía llegó a personarse aquella noche, finalmente, los agentes se retiraron ante no hallar signos de peligro en la vía. El cadáver fue localizado al día después.
El sacerdote
Natural de Wrentham (Massachusetts), Richard Gross ha tenido una vida muy interesante con la religión siempre por delante, ya que era sacerdote desde 1976. Siempre muy cercano a su familia (tuvo tres hermanas y un hermano), estudió en el Boston College antes de hacerse jesuita y trabajó durante años impartiendo la fe --y Ciencias Sociales e Historia-- en centros educativos, también en las universidades de LaSalle o Vanderbilt, llegando a trabajar durante más de una década en un prestigioso internado llamado Philips Academy.
En Jesuist USA East apuntan que solo fueron cinco años los que pasó dirigiendo el Boston College High School cuando se ordenó, pero sus alumnos le marcaron, tanto, que llegó a presidir las bodas de muchos de ellos y hasta sus funerales. Hizo lo propio con profesores y alumnos de Exeter, otro centro donde estuvo trabajando.
La comunidad jesuita lo define como un hombre "de espíritu aventurero". A comienzos de este siglo, eligió Bélgica para pasar un año sabático en el Colegio Americano de Lovaina, de donde volvió para dedicarse como capellán en varias escuelas laicas de Vanderbilt.
Amaba viajar y sus alumnos dicen que era habitual verlo "en lugares sorprendentes", lo que facilita comprender cómo un anciano estadounidense había acabado viajando hasta Málaga en solitario. Aseguran que era un hombre muy seguro de sí mismo y con una energía boyante.
En los últimos años, curiosamente, tras recorrer incontables colegios e iglesias, Richard volvió al lugar donde dio sus primeros pasos, allá por el año 1968: a la comunidad jesuita de BC High, donde vivía en una residencia, continuando su labor pastoral.
También ha estado trabajando recientemente en la Iglesia de Nuestra Señora del Buen Viaje, cuya organización ha compartido en Facebook un post lamentando su pérdida. Uno de los fieles que acudía a sus misas pone en valor en un comentario lo mucho que se preocupaba por las personas, preguntándoles por sus vidas. "Siempre serás inolvidable", dice otra.