El crimen de Ángela, la mujer hallada muerta en una arqueta de Teatinos, será juzgado por un jurado popular

Recordarán la historia, ya que es uno de los crímenes más estremecedores de los últimos años en la provincia de Málaga. Ángela Mérida, de 60 años, era localizada sin vida en el interior de una alcantarilla el 12 de julio de 2022 con claros signos de violencia tras unos días desaparecida. 

Su cadáver fue encontrado a unos ocho metros de profundidad, por lo que fue necesaria la intervención de los bomberos para sacarlo al exterior con mucha dificultad. Al parecer, su hijo adoptivo, en compañía de un amigo menor de edad, fue quien la mató y la depositó en la arqueta, motivo por el que en breve se sentará en el banquillo de los acusados para ser juzgado por un delito de asesinato, profanación de cadáver y robo con violencia. 

También tendrán que acudir al juzgado otras dos mujeres, procesadas por encubrimiento, según han confirmado fuentes judiciales que han precisado que estas dos últimas solo están acusadas por los abogados que representan las acusaciones particulares. A estas tres personas se les enjuiciará por la ley de procedimiento de Jurado, pero por estos hechos ya fue juzgado y condenado un menor de 17 años -ajeno a la familia- que reconoció los hechos y se acordó su internamiento cerrado durante ocho años y otros tantos de libertad vigilada.

En la sentencia sobre el menor se consideró probado que éste y el hijo de la fallecida estrangularon a la mujer, la metieron en un congelador y días más tarde la tiraron a una arqueta, donde fue localizada gracias a las indicaciones del primero, pese a que el hijo había asegurado que su madre se había marchado el 23 de mayo de 2022 y desconocía su paradero.

En el relato acusatorio se indica que el hijo adoptivo de la fallecida, que en el momento de los hechos tenía 22 años, el 25 de mayo de 2022 en compañía de un menor, que en ese momento tenía 16, se pusieron de acuerdo para entrar por la fuerza en la vivienda de la víctima con intención de obtener "un enriquecimiento" y la esperaron allí hasta que llegó sobre las 15.00 horas.

El hijo presuntamente se puso un pasamontañas para evitar ser reconocido por su madre, siempre según la acusación, y cuando Ángela entró en el domicilio comenzó a gritarle y a preguntarles qué hacían allí.

En un momento dado el menor la tiró al suelo en el salón y la agredieron con patadas y puñetazos en la cabeza, al tiempo que le pidieron el pin de su tarjeta de crédito y le preguntaron por su vehículo.

La mujer les dijo que tenía 900 euros en el bolso, que el coche estaba en el taller y no tenía joyas y, en un determinado momento, supuestamente el hijo le ató las manos y los pies y la amordazaron con un trapo y una cuerda.

E.E

El hijo mayor de Ángela, la mujer hallada en una arqueta de Málaga: "Me la han matado por 900 pavos"

La víctima pudo sacarse la cuerda de la boca pero ambos aprovechando que la cuerda estaba a la altura del cuello tiraron de la misma hasta matarla.

A continuación se apropiaron de los 900 euros que tenía en su bolso y acordaron meter el cuerpo en un congelador que había en su domicilio donde permaneció al menos dos días, para luego limpiar la casa. Posteriormente y con la finalidad de profanar su cadáver, lo trasladaron a un trastero de la casa y la metieron en un baúl, hasta que, uno o dos días después y tras buscar un sitio donde deshacerse del cuerpo, lo trasladaron presuntamente en un carro de supermercado para tirarlo en una arqueta.

El 4 de junio de 2022 la Policía Nacional se personó en el domicilio de la víctima y el hijo aseguró a los agentes que su madre se había marchado el 23 de mayo con algunas de sus pertenencias pero que desconocía su paradero. Así, finalmente descubrieron el hallazgo de su cuerpo gracias a las indicaciones que les aportó el chico menor de edad.