Equipo de Vodafone y de la UMA que participan en este proyecto.

Equipo de Vodafone y de la UMA que participan en este proyecto.

Tecnología

Vodafone y la UMA revolucionarán las redes móviles con chips fotónicos de silicio

La colaboración entre la empresa y la universidad malagueña impulsa una tecnología capaz de dirigir señales con precisión, aumentar la eficiencia energética y preparar las redes para el salto a 6G.

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Vodafone y un equipo de investigadores de la Universidad de Málaga han unido esfuerzos en un ambicioso proyecto que busca desarrollar chips fotónicos de silicio. Esta tecnología permitirá mejorar significativamente la eficiencia y velocidad de las comunicaciones móviles gracias al uso de luz en lugar de electricidad.

El trabajo se lleva a cabo desde el Photonics and Radiofrequency Research Lab, integrado en el Instituto TELMA, especializado en telecomunicaciones. Su foco principal es la fotónica de microondas, una disciplina emergente que permite procesar señales de radiofrecuencia mediante tecnologías ópticas avanzadas.

A diferencia de los circuitos tradicionales, que manipulan electrones, los chips fotónicos gestionan fotones. Esto les brinda la capacidad de operar a velocidades muy superiores, con mayor precisión y menos interferencias, abriendo nuevas posibilidades para la infraestructura de redes móviles.

La intención del proyecto es incorporar estos chips en estaciones base de telefonía. Con ellos, las antenas podrán orientar las señales hacia direcciones específicas, en función de la ubicación del usuario, mejorando notablemente la calidad del servicio y reduciendo pérdidas.

Según Iñigo Molina, catedrático de Teoría de la Señal y líder del grupo de investigación, esta tecnología permitirá incrementar la capacidad de las redes, minimizar interferencias con otras frecuencias y garantizar conexiones más estables en entornos saturados.

Esta técnica, conocida como beamforming fotónico, supera los límites del beamforming electrónico. Mientras que el sistema tradicional opera con restricciones de frecuencia, la versión óptica permite una cobertura más amplia y precisa, fundamental para los futuros desarrollos en 5G y 6G.

Además, la iniciativa forma parte de un proyecto europeo denominado IPCEI, apoyado por el Ministerio de Industria y Turismo de España. Este programa impulsa tecnologías estratégicas para reforzar la soberanía tecnológica del continente y acelerar la innovación en sectores clave.

Vodafone y la UMA ya trabajan en dos prototipos. El primero es un chip pasivo destinado a validar el concepto inicial. El segundo será activo, más complejo, y sustituirá componentes electrónicos actuales para dotar a las unidades de radio de mayor capacidad óptica.

El diseño final prevé que un solo mástil pueda contener hasta 32 antenas, todas controladas individualmente. Esta arquitectura permitirá orientar múltiples haces de señal hacia diferentes usuarios, optimizando la cobertura y reduciendo el gasto energético significativamente.

El uso de fotónica en redes móviles también favorece la sostenibilidad. Los chips fotónicos requieren menos energía para operar y permiten un control más preciso del tráfico de datos, reduciendo el impacto medioambiental de las infraestructuras de telecomunicaciones.

Este avance será fundamental para dar soporte a tecnologías emergentes. Entre ellas, los vehículos autónomos, la automatización industrial, los sistemas de radar avanzados y las comunicaciones satelitales directas se beneficiarán de una red más rápida, estable y flexible.

La Universidad de Málaga, pionera en fotónica, ha consolidado su liderazgo en este campo con la creación de empresas tecnológicas como Bioherent y AGPhotonics, nacidas del entorno investigador del Photonics & RF Research Lab y basadas en innovación aplicada.

Málaga, gracias a estas iniciativas, se posiciona como un polo de referencia internacional en innovación en telecomunicaciones. La sinergia entre universidad e industria está siendo clave para llevar las redes móviles hacia una nueva generación más rápida, eficiente y sostenible.

Por su parte, Vodafone busca acelerar el diseño de unidades ópticas de radio, capaces de ofrecer servicios de alta calidad incluso en zonas de alta densidad de usuarios, como estadios, estaciones de transporte, centros comerciales o eventos multitudinarios.

La empresa prevé que estas nuevas tecnologías permitan ofrecer una experiencia de usuario sin interrupciones. Con menor latencia y mayores velocidades, los chips fotónicos garantizarán la estabilidad de la conexión incluso en entornos con alta demanda simultánea.

Una vez completadas las fases de validación y pruebas en entornos reales, los sistemas desarrollados podrán ser incorporados a redes comerciales. Esta integración supondrá una ruptura con el modelo actual, sentando las bases de las redes ópticas móviles del futuro.

El impacto de esta tecnología no se limita al rendimiento técnico. También respalda los objetivos medioambientales y de eficiencia de Vodafone, alineándose con estrategias globales para reducir el consumo energético y promover infraestructuras sostenibles en el sector de las telecomunicaciones.