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Cae un grupo criminal que usaban armas de fuego simuladas para intimidar a víctimas en Málaga

La operación de la Guardia Civil ha finalizado con la detención de seis personas que habrían obtenido un botín de más de 8.000 euros.

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Cae un grupo criminal dedicado a perpetrar robos con violencia e intimidación en la provincia de Málaga. La Guardia Civil, enmarcada en la denominada operación 'Campicon', ha detenido a seis personas que hacían uso de armas de fuego simuladas y armas blancas, según han indicado en un comunicado.

A los arrestados a los que se les atribuye, en menos de un mes, la comisión de cuatro atracos en estaciones de servicio, uno a un supermercado y un asalto a un viandante, en las que habrían obtenido un botín de más de 8.000 euros.

La operación ha sido llevada a cabo por guardias civiles pertenecientes a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga, y se inició en febrero de 2024.

En esa fecha tuvieron lugar los dos primeros atracos en gasolineras de los municipios malagueños de Campillos y Rincón de la Victoria donde, tras amenazar con armas de fuego a sus dependientes, se hicieron con un botín de 4.000 euros.

Varias semanas después se cometieron otros dos asaltos utilizándose el mismo modus operandi en sendas estaciones de servicio ubicadas en los municipios malagueños de Casarabonela y Monda.

Los primeros datos de la investigación determinaron que este grupo criminal realizaban los atracos en menos de un minuto y siempre coincidiendo con el horario de cierre de los establecimientos.

Tras numerosas gestiones operativas realizadas durante meses por los investigadores, se logró identificar a todos los componentes del grupo criminal y supuestos autores de los hechos.

Robo con violencia 

También la investigación ha demostrado que estos individuos habrían sido los supuestos autores de un robo con violencia e intimidación en un supermercado de Pizarra y de un atraco a un viandante en Cártama, haciéndose uso en estas dos ocasiones de armas blancas para intimar a sus víctimas.

Con todos los datos de la investigación recopilados, los guardias civiles decidieron realizar la fase de explotación de esta operación, realizándose varios registros domiciliarios en las localidades de Alhaurín de la Torre y Cártama, lugar de residencia de los presuntos delincuentes, donde se obtuvieron concluyentes pruebas e indicios de la supuesta autoría de los todos los delitos cometidos por este grupo criminal, interviniéndose además del vehículo que habrían usado en los atracos.