Muchos de los cerca de 200 taxistas que a diario prestan sus servicios en el aeropuerto de Málaga acuden a diario a sus puestos "con miedo, asustados y acosados". Este es el sentir que, según denuncian desde Aumat, la principal asociación de taxistas de Málaga, tienen muchos profesionales ante la "violencia" que ejercen desde hace varios meses un grupo de piratas que trata de captar clientes de manera irregular en el aeródromo.

Miguel Ángel Martín, presidente del colectivo, es contundente en su denuncia verbal y subraya la necesidad de que tanto Aena como la Policía Nacional y la Policía Nacional tomen cartas en el asunto. "Tenemos que trabajar todas las partes para erradicar este problema", reclama.

¿Dónde radica el problema? Según cuenta Martín, existe un grupo de unos 30 o más taxistas piratas, "de diferentes nacionalidades", que ofrece sus servicios a los pasajeros que llegan al aeropuerto de la capital de la Costa del Sol.

El problema es que cuando los taxistas legales informan a los usuarios sobre los servicios irregulares que se les ofrecen, la reacción de estos sujetos suele ser violenta. "Ir a prestar un servicio público y que te sientas amenazado es muy duro", subraya.

"Es una mafia organizada, unos piratas que les dicen a los taxistas que saben dónde tienen sus coches, que se los van a quemar y que saben a qué colegio van sus hijos", detalla Martín, quien admite que muchos compañeros no denuncian los hechos por miedo. Pese a ello, anima a los conductores a hacerlo y ofrece el asesoramiento de la asociación.

Dado que la situación persiste, el presidente de Aumat insiste en que es necesario un refuerzo de las acciones por parte de la Policía Nacional. De hecho, ha solicitado una reunión con el comisario del Cuerpo en la provincia. Encuentro que por el momento ni se ha celebrado ni tiene fecha. A Aena ha pedido que instale algún tipo de barrera que impida a estos taxistas pirata poder acceder al aparcamiento de rent a car.

En cuanto a la Policía Local, el representante de los taxistas informa que cuenta con una unidad permanente en el aeropuerto, pero es cuando se retira por un relevo o porque tiene que atender algún servicio "cuando los piratas actúan de manera más violenta tratando de captar a viajeros". Martín sí admite que en las últimas semanas los agentes municipales han podido sancionar a varios de estos vehículos.