
En la izquierda, una imagen del edificio semiderribado. En la derecha, proyección virtual del futuro complejo, difundida por el Ayuntamiento de Madrid.
El histórico Noviciado de Chamartín, salvado en 2017 del derribo gracias a un tuit, será una residencia de estudiantes
El antiguo Noviciado de las Damas Apostólicas, situado en el número 198 del Paseo de La Habana, será una residencia de estudiantes. El conjunto fue declarado Bien de Interés Patrimonial (BIP) en 2018 después de que se interrumpiera forzosamente su derribo tras un lío municipal que lo dejó al borde de la muerte.
El nuevo proyecto, que aprobará este jueves el Ayuntamiento de José Luis Martínez-Almeida, protegerá la "parcela y los inmuebles". Así lo ha confirmado este jueves el delegado del Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter).
El planeamiento blindará el Noviciado y el Pabellón en el Catálogo de Edificios Protegidos, así como los jardines y patios interiores. Además, se sembrarán las condiciones para que las nuevas edificaciones proyectadas guarden "relación" con el edificio recuperado. Todo ello -indica el concejal- respetando el perímetro del antiguo Noviciado y manteniendo el arbolado del jardín protegido. El plan contempla instalar nuevas zonas verdes, patios ajardinados y azoteas verdes que recrean a la antigua huerta.
Aprobamos hoy el planeamiento que blinda Noviciado de las Damas Apostólicas
— Borja Carabante (@bcarabante) March 27, 2025
Revitalizará este entorno de Chamartín con una residencia de estudiantes
El proyecto protege un jardín de casi 4.000 m2 y respeta el proyecto original y su historia https://t.co/CEjS3JxjyX pic.twitter.com/0LsdYq4g6S
El Noviciado de las Damas Apostólicas lo compone un conjunto de edificios proyectado por el arquitecto Críspulo Moro Cabeza en 1928. Se construyó entre 1929 y 1930 como un ejemplo tardío del neomudéjar, caracterizado por el uso del ladrillo.
Las primeras novicias realizaron sus votos en 1930. Durante la Guerra Civil, el edificio fue ocupado y su iglesia sufrió "importantes daños", siendo reparada y reinaugurada en 1943, como recuerda la Comunidad de Madrid.
Desde entonces, se sucedieron reformas y cambios. En las últimas décadas, con la disminución de vocaciones religiosas, perdió el carácter de noviciado, aunque siguió acogiendo actividades relacionadas con la vida espiritual, como casa de ejercicios y residencia.
Cuando el Gobierno regional lo declaró BIP, el Noviciado de las Damas Apostólicas presentaba un "mal estado de conservación, con los espacios interiores y huecos de fachada muy alterados". Las zonas demolidas afectaron aproximadamente al 30 por ciento de las fachadas.
El tuit que paralizó su destrucción
Tal y como recogió EL ESPAÑOL, fue un tuit lo que salvó al convento neomudéjar del derribo total. Una promotora compró la finca de 17.000 metros cuadrados en mayo de 2017 y empezó a demoler el edificio central. Pero un comentario en la red social alertó a la entonces directora de Patrimonio de la Comunidad de Madrid, Paloma Sobrini, que hizo lo posible para frenar el derribo.
Cuando la Dirección General de Patrimonio se presentó en el Paseo de La Habana se les mostró una licencia municipal. La Comunidad llamó a la Policía y, entonces sí, el Ayuntamiento, gobernado por Manuela Carmena, paralizó la demolición.
Al parecer, aquella intervención que casi destruye el complejo estaba supuestamente respaldada por una declaración responsable, algo así como una declaración de intenciones para agilizar la burocracia. La declaración, además, hizo que la intervención no pasara por las comisiones de Patrimonio.
¿Se puede derribar un convento anterior a 1936? La ley de Patrimonio de la Comunidad dice que NO... ¿qué va a hacer, @PalomaSobrini? pic.twitter.com/S5scZTO2j9
— MCyP / #SOSPatrimonio (@madridcyp) June 21, 2017
NO, es BIP x la Disp Trans 1. Compruebo y si es así paralizar demolición.
— paloma sobrini (@PalomaSobrini) June 21, 2017
Desde el Ejecutivo de Carmena explicaron a este periódico que el permiso de demolición se otorgó en 2011, en el último año de Alberto Ruiz-Gallardón como regidor. Pero la declaración responsable sí que se había producido en 2017. Los conventos construidos antes de 1936 deberían estar protegidos por ley, condición que no estaba actualizada en el catálogo patrimonial del Consistorio. Fue así como se pasó por alto que se iba a derribar la construcción histórica.
Según detalla El Confidencial, uno de los medios que ha avanzado el paso que el Consistorio da este jueves, los tribunales terminaron fallando que tanto el edificio central, como otras dependencias del complejo, merecían efectivamente ser protegidos, pero no estaban catalogados cuando la promotora adquirió el enclave. La compañía, por tanto, quedó eximida de responsabilidad.