Eso ha debido pensar la Consejería de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, que ha reunido este mes a 30 expertos de la industria 4.0 para reflexionar, para analizar el presente y para mirar al futuro.

Este macro consejo asesor busca nuevas ideas, nuevos proyectos estratégicos que hagan que la industria cántabra complete ese salto hacia el 4.0 tan necesario en la economía actual.

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Opiniones hay de todo tipo, pero se puede destacar una que podría marcar el punto de partida general de estas jornadas. La dio el director de la Fundación i2Cat, Josep Paradells: "La impresión que tenemos es que la industria está en retroceso en las economías europeas, por lo que hay que hacer algo para frenar esto".

Se trata de una visión un tanto pesimista pero que da una idea del contexto en el que se celebró esa reunión.

En esencia, no conviene olvidarlo, la industria 4.0 es clave para frenar esa caída, según coinciden los expertos. Es una "revolución" que combina técnicas avanzadas de producción con tecnologías inteligentes como la robótica, la inteligencia artificial y el Internet of Things (IoT), y que, entre otras, ofrece "enormes oportunidades para el desarrollo de nuevos modelos de producción, innovación en los procesos y especialización en los servicios".

Y esa nueva industria, tampoco conviene pasarlo por alto, es uno de los ecosistemas de referencia de la Estrategia de Especialización Inteligente de Cantabria 2021-2027 (RIS3).

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El objetivo, identificar las oportunidades estratégicas que ofrece la industria 4.0 en una región como Cantabria. Jaime Rodríguez, CEO de Reyca, recalca que se trata de "producir más, más eficientemente y con una mayor productividad".

A través de uno de sus procesos de descubrimiento emprendedor, el Centro Internacional Santander Emprendimiento (CISE), entidad que forman el gobierno de Cantabria, la Universidad de Cantabria y el Banco Santander, coordinó dos sesiones de trabajo con este grupo de especialistas para identificar las propuestas con mayor potencial para acelerar la transición hacia la industria 4.0 en Cantabria.

Tras debatir sobre una veintena de ideas planteadas por los expertos en la sesión inicial, posteriormente se trabajó para identificar las propuestas más valiosas en base a diferentes criterios de viabilidad e impacto.

Las principales ideas

Las ideas mejor valoradas se desarrollaron en detalle para definir un plan de acción que permita ejecutarlas, con sus respectivos objetivos sociales, medioambientales y económicos, el marco legal, los conocimientos y las infraestructuras necesarias, los productos y servicios que requieren, los recursos que precisan y los cuellos de botella que deben superar.

En la mesa de trabajo sobre 'Automatización, Robotización y Fabricación Avanzada', la necesidad más clara identificada por los expertos es la de potenciar la capacitación en torno a estas tres tecnologías.

Para ello se propone la creación de un Centro de Formación donde las empresas puedan identificar sus necesidades específicas en estas tecnologías de cara a formar a empleados y estudiantes, procedentes tanto de universidades como de formación profesional.

El plan formativo, según los expertos, debería contar con un importante porcentaje de horas prácticas en las propias empresas, aprovechando la experiencia previa de la FP Dual. La prioridad sería la formación en automatización, la tecnología más demandada de las tres en las pymes de Cantabria.

En la mesa de 'Descarbonización, Transición Industrial y Sostenibilidad energética', más que una idea específica se valoró por encima de todo la necesidad de afrontar la transición industrial en Cantabria a través de la descarbonización y la sostenibilidad energética sustentada en tres pilares: un marco legal regional sobre descarbonización en el que tenga cabida la Plataforma Regional del Hidrógeno; la búsqueda de la eficiencia energética a través de la concienciación de su obligatoriedad y de la monitorización y análisis de los consumos energéticos; y la participación y sensibilización de la opinión pública sobre los beneficios de las energías renovables.

La mesa de 'IoT, Inteligencia Artificial y Big Data' añadió dos ideas de alto valor. La primera, la creación de un Centro de Ciberseguridad y Computación de Cantabria para formar, asesorar, difundir y compartir datos con empresas e instituciones. La segunda, la paquetización de servicios de mantenimiento predictivo especializados en los principales sectores de la región.

El papel de la administración

La mesa de 'Comunicaciones por Satélite y Radiofrecuencia y Digitalización' apostó por la creación del Laboratorio Industria 4.0, un espacio de conexión entre la industria tradicional que no ha dado aún el salto tecnológico, empresas innovadoras que están implementando soluciones 4.0 y emprendedores.

La Dirección General de Innovación, Desarrollo Tecnológico y Emprendimiento Industrial estudiará ahora estas propuestas para decidir si se integran en la Estrategia de Especialización Inteligente de Cantabria 2021-2027 y se facilitan los recursos necesarios para desarrollarlas.

En esencia, esta cuarta revolución industrial no solo afectará a los procesos de fabricación. Su alcance es mucho más amplio, afectando a todas las industrias y sectores económicos y sociales, por lo que acelerar su implantación en la comunidad es clave para el futuro de toda la región, no sólo de la industria.

"Cantabria tiene el conocimiento y empresas que han surgido a través de startups, pero también tiene la capacidad de establecer sinergias para favorecer factores de proximidad", resumen Mario Mañana Canteli, vicerrector del Campus de Sostenibilidad de Transformación Digital de la Universidad de Cantabria.