El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, durante el Comité Federal del partido este sábado, en la sede del PSOE en la madrileña calle de Ferraz.

El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, durante el Comité Federal del partido este sábado, en la sede del PSOE en la madrileña calle de Ferraz. EFE

Política

Sánchez sólo admite que se "equivocó" al "confiar" en los corruptos y pide apoyo para que su "Gobierno excepcional" combata a la "jauría ultra"

Elude cualquier responsabilidad, pasa de puntillas sobre las actividades de Koldo, Ábalos y Cerdán, y anuncia 13 medidas para reforzar los controles en el PSOE.

Reivindica el feminismo y pide que se denuncie el acoso por los "canales internos" pero ni siquiera menciona la renuncia de Paco Salazar como hombre fuerte de Ferraz.

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El presidente Pedro Sánchez se ha mostrado este sábado como víctima de una "traición dolorosa" y únicamente ha reconocido el "error" de haber depositado su "confianza en personas que no la merecían", ha dicho en alusión a los exsecretarios de Organización del PSOE Santos Cerdán y José Luis Ábalos.

"Comparezco ante vosotros, evidentemente con el corazón tocado", ha dicho el líder del PSOE, para mostrar su decepción con sus antiguos compañeros de partido, "pero también con la determinación intacta y con las mismas ganas de plantar cara a la adversidad y de volver a superarla". 

Pero, durante su intervención ante el Comité Federal del PSOE, no ha asumido ninguna otra responsabilidad, por los graves escándalos de corrupción que salpican al Gobierno y al partido.

Vídeo | Así ha sido el discurso íntegro de Pedro Sánchez este sábado en la reunión del Comité Federal del PSOE

Sánchez ha desgranado los avances sociales impulsados por su Gobierno durante los últimos siete años, y ha agitado de nuevo la amenaza de la extrema derecha, para reafirmar su decisión de seguir adelante con la "excelente" y "formidable" labor de su Ejecutivo.

"Vosotros y vosotras me elegisteis como capitán de este barco y el capitán no se desentiende", ha dicho utilizando similares términos a los de su anterior intervención en Ferraz, "cuando viene mala mar, se queda a capear el temporal y ganar el puerto".

Para evitar que se vuelvan a repetir casos como los de Ábalos, Cerdán y Koldo García, Sánchez ha anunciado 13 medidas para reforzar los mecanismos de control interno.

El partido publicará más información de su gestión económica en la web de transparencia, ampliará los poderes de la Comisión de Ética y Garantías, y pondrá en marcha un protocolo de antifraude y anticorrupción copiado del PSC.

Y ha avanzado que el próximo miércoles anunciará otras reformas legislativas, durante su comparecencia en el Pleno del Congreso de los Diputados, en la que hablará sobre los casos de corrupción del PSOE, pero también sobre la Cumbre de la OTAN y los acuerdos de la última Comisión Europea.

El Comité Federal de este sábado había creado una gran expectación, pues debe aprobar los nuevos nombramientos en la Ejecutiva socialista. Entre otros, el de Rebeca Torró, nueva secretaria de Organización del partido, cargo que ocupaba antes Santos Cerdán, ahora investigado por corrupción en el Tribunal Supremo.

Sin embargo, la sesión ha comenzado con un sobresalto, ya que tan sólo unos minutos antes Paco Salazar ha renunciado al cargo de adjunto a la Secretaría de Organización, para el que había sido propuesto, después de que varias mujeres le hayan acusado de "acoso sexual" durante su labor en la Moncloa.

Sánchez ha eludido por completo este escándalo en su discurso, si bien ha lanzado la siguiente recomendación a las militantes del partido: "Cuando haya potenciales casos de agresión o acoso, le pido a las compañeras que utilicen los canales [de denuncia interna], las vamos a proteger".

Sí ha sido más explícito al referirse a los audios, entregados al juez por la UCO; en los que el exministro José Luis Ábalos y su asesor Koldo García comentaban las cualidades de las prostitutas a las que iban a contratar.

"En estos casos de corrupción hemos escuchado unos audios que han revelado un machismo que nos resulta incompatible con nuestros valores", ha dicho Pedro Sánchez.

"Ser feminista no es un acto de postureo que se satisfaga yendo a las manifestaciones del 8M o poniéndose el lazo violeta en la solapa. Para los socialistas el feminismo es una forma de ser, un compromiso real que exige vivir como se piensa".

Y ha anunciado, como ya hizo el viernes el partido, una reforma de los estatutos para expulsar a los militantes que contraten los servicios sexuales de prostitutas. Porque, ha recalcado, "el cuerpo de una mujer no está en venta".

También ha llevado al Comité Ejecutivo una resolución de "condena absoluta y tolerancia cero ante cualquier acción o declaración machista" y ha anunciado que se reforzarán los protocolos internos para denunciar cualquier tipo de "acoso sexual".

Para justificar su continuidad al frente del Gobierno y del partido, Sánchez ha esgrimido la necesidad de frenar a la extrema derecha, a su juicio cada vez más asimilada con el PP de Feijóo.

Y ha dicho sentirse "amenazado" por las palabras del expresidente José María Aznar, quien el viernes advirtió al Gobierno, durante el Congreso Nacional del PP: "Si negocias presupuestos en una prisión, te asocias con presidiarios y pactas una amnistía con delincuentes, no te extrañe acabar en la cárcel: es tu ambiente".

"No nos ven como adversarios políticos legítimos en una democracia y en una contienda electoral", ha dicho al respecto Pedro Sánchez, "nos ven como enemigos contra los que todo vale, las mentiras, el odio y, como vimos ayer, hasta las amenazas".

El presidente ha dibujado un panorama sombrío, al aludir a la supuesta alianza entre los dos partidos de la oposición: "La coalición ultraderechista en España ya se ha quitado la careta definitivamente", ha dicho, "ya no solo les basta con recortar el estado del bienestar, sino que también cercenan los derechos de la mayoría o también de las minorías".

Y más aún: "Quieren llevarnos en política internacional al aislacionismo, en materia climática al negacionismo y en materia de convivencia al odio que ya impera en otros países occidentales".

Ante el avance de la extrema derecha en toda Europa, ha señalado Sánchez, el Gobierno español es "un referente y un faro de esperanza para millones de personas progresistas en España, en Europa y en el mundo".

Todos estos riesgos han servido para que Pedro Sánchez justifique su decisión de no convocar elecciones hasta 2027, pese a los escándalos de corrupción que salpican al Gobierno, a su partido y su entorno personal.

Sánchez ha denunciado los ataques que sufren en toda España las sedes del PSOE y ha agradecido la labor de "nuestros jóvenes, y no tan jóvenes, que se baten el cobre a diario en las redes sociales contra la jauría ultraderechista".