Profesores de las universidades públicas de Madrid convocan huelga preventiva contra Ayuso por una ley que aún no conocen

El Gobierno de la Comunidad de Madrid sigue preparando la que será la futura ley de universidades de la región. El documento todavía no ha visto la luz (ni siquiera en fase de audiencia e información pública) pero ya ha puesto en pie de guerra a parte de la comunidad educativa.

Por eso, habrá una jornada de huelga de profesores universitarios el próximo 28 de abril.

Para estos profesores, el modelo de financiación que planteará la nueva ley derivará en una "mercantilización del conocimiento", que supondrá la "redefinición y cierre de grados" y líneas de investigación por número de estudiantes y "criterios de mercado".

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Pero los primeros en protestar fueron estudiantes de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) que se encerraron junto con unos pocos docentes para denunciar la "falta de financiación en infraestructuras, materiales e investigación" a las que, aseguran, les abocaba la futura ley.

El citado encierro fue en la Facultad de Matemáticas y tuvo un seguimiento de unas 400 personas. Ahora esperan que el movimiento de oposición crezca con la convocatoria de huelga.

La idea es hacer presión durante las negociaciones de la ley. La movilización ha sido convocada por edes de profesores de la Complutense, de la Autónoma (UAM), Carlos III, Politécnica, Alcalá y Rey Juan Carlos. Es decir, las seis universidades públicas de Madrid.

Según las plataformas, la movilización responde a "dos motivos fundamentales: la asfixia económica que sufren las universidades y el "ataque frontal" que supone la Ley de Enseñanzas Superiores, Universidades y Ciencia (LESUC) que el Gobierno de la Comunidad de Madrid está elaborando "con total opacidad", según un comunicado de la plataforma Universidad Autónoma de Madrid (UAM) por la Pública.

Hay que recordar que ese borrador se filtró en parte, aunque no en su totalidad, y que sindicatos como CCOO, que están en la mesa de negociación con la Consejería de Educación, se niegan a valorarlo, puesto que consideran que es una forma de desviar la atención de la negociación.

Entre los puntos más polémicos del borrador filtrado, al que tuvo acceso este diario, la plataforma de profesores destaca la "financiación externa y por objetivos, las facilidades a las privadas, y el peso de las empresas y de la Comunidad de Madrid en las decisiones de los Consejos Sociales universitarios".

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Tal y como publicó EL ESPAÑOL, el Gobierno madrileño propone que una parte de los ingresos de las universidades proceda de la captación de fondos privados. Concretamente, el 30 %. Esto puede abrir la puerta a másteres con empresas privadas o a formaciones con entidades sociales. También contempla que los centros tengan ayuda de "fondos de inversión" mediante donaciones o mecenazgo.

Algunos sindicatos denuncian que esta fórmula supone un retroceso, pues supone que la Comunidad financie como mucho el 70%. "Además, se impulsa la privatización de las universidades públicas, con la creación de fondos de inversión", señala CCOO.

Los rectores, por su parte, prefieren guardar silencio, aunque reconocen que Ayuso les da un presupuesto finalista, algo que llevan demandando desde hace décadas a los ministerios correspondientes. Además, agradecen que la financiación de las universidades se divida en tres apartados: básica (que será para los profesores y gastos del día a día), infraestructuras (muchas facultades de Madrid son antiguas y necesitan remozarse) y objetivos.

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Precisamente, en el citado borrador se hablaba de ese "cumplimiento de objetivos" que ahora los docentes prevén que puede derivar en eliminar formaciones concretas. Lo que dice el documento es que puede haber carreras y másteres o doctorados si no tienen una "demanda real" en el sistema.

Este punto puede perjudicar, como explican los profesores en su comunicado, a algunas carreras como las de Letras, pero a su vez beneficia a otras como las ingenierías, donde la falta de fondos, a menudo, dificulta la ampliación de la oferta.

Tras indicar que la huelga ya ha sido comunicada a la Comunidad de Madrid y los rectorados, desde la plataforma que ha convocado la movilización han animado "a toda la comunidad universitaria, más allá de siglas o afinidades, a sumarse a las movilizaciones. Frente a un ataque común, una respuesta colectiva". Tal y como ha podido saber este diario, esperan que representantes del PSOE y Más Madrid les apoyen "llegado el día".