Juan Lobato, en la sesión de control al Gobierno del Senado el pasado 3 de diciembre.

Juan Lobato, en la sesión de control al Gobierno del Senado el pasado 3 de diciembre. Fernando Sánchez Europa Press

Política PSOE

Lobato alegará un 'deber público inexcusable' para seguir en el Senado y el PSOE dice que es "impresentable" que no se vaya

La dirección del partido considera que no es compatible, según la Ley Electoral, que compagine todos esos cargos y se abre a pedirle el acta de diputado. 

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Juan Lobato pretende volver a su puesto en la Agencia Tributaria y seguir siendo senador y parlamentario autonómico del PSOE. Es una decisión que está generando incomodidad en la dirección del partido, tanto la madrileña como la nacional, porque considera dichas labores incompatibles. Sin embargo, según ha podido saber este diario, Lobato alegará un "deber público inexcusable" para intentar no renunciar a nada.

Esta intención es un desafío a la actual dirección socialista en Madrid, encabezada por el ministro Óscar López, que está valorando pedirle el acta por entender que no se puede compatibilizar. Fuentes tanto de Ferraz como del PSOE madrileño (PSM) consideran que es "impresentable" que Lobato no se vaya de la Cámara Alta y mantenga el escaño de designación autonómica que tiene.

El PSM celebró este fin de semana su congreso regional para encumbrar a López y designar una nueva Ejecutiva, cerrando así la etapa de Lobato como secretario general de los socialistas madrileños, caída que comenzó el pasado 4 de diciembre cuando anunció que no iría a unas primarias contra López.

Este lunes, un día después del congreso regional que ha borrado su huella en el partido, Lobato anunció que pretendía continuar como senador (lo es por designación autonómica) en el nuevo periodo de sesiones, que comienza este mes de febrero. Y dijo que pediría la reincorporación a su puesto como técnico de la Agencia Tributaria.

Intentando sortear la incompatibilidad, Lobato dijo también en el mismo comunicado que renunciará a su asignación salarial del Senado. Sin embargo, no está del todo claro que ambos puestos se puedan compaginar, según la Ley Orgánica del Régimen Electoral General.

En su artículo 157.3, la norma establece que "la condición de Diputado y Senador es incompatible con el ejercicio de la función pública y con el desempeño de cualquier otro puesto que figure al servicio o en los presupuestos de los órganos constitucionales, de las Administraciones Públicas, sus Organismos y entes públicos, empresas con participación pública directa o indirecta, mayoritaria, o con cualquier actividad por cuenta directa o indirecta de los mismos".

Sin embargo, fuentes cercanas a Lobato aseguran que está convencido de que no habrá problema para pedir su incorporación y que alegará el permiso "por deber público inexcusable que tienen los funcionarios". Su intención es que una vez esté incorporado en Hacienda, ello le pueda permitir a acudir a las sesiones del Senado.

Se entiende como deber inexcusable de carácter público o personal aquel cuyo cumplimiento no puede eludirse o que genere una responsabilidad de orden civil, penal o administrativo. Aunque está sujeto a unos casos que la Comisión de Incompatibilidades del Senado tendrá que ver si son aplicables en el caso de Lobato.

El ex secretario general de los socialistas madrileños tiene intención de usarlo para acudir, sobre todo, a las comisiones de Hacienda, Economía y Comunidades Autónomas. Ello también le permite tener un acceso directo a la actualidad política y a los medios de comunicación y no convertirse en un militante más.

Malestar en el PSOE

Sin embargo, la actitud de Lobato está generando cierto malestar en el PSOE, tanto en la dirección federal del partido como en el PSM. Fuentes de la formación confirman a este diario que su escenario ideal es que entregue el acta de senador y de diputado de la Asamblea de Madrid y que abandone la representación pública.

Aseguran que es "impresentable" que siga de senador y que "encima, quiera seguir con su trabajo de funcionario". Sin embargo, parece que de momento no tienen la intención de confrontar directamente con él y que se van a dar tiempo para ver cómo evolucionan las posibles incompatibilidades.

Un ejemplo de la indiferencia y la frialdad lo protagonizó Óscar López este lunes en una entrevista en la Cadena SER. Cuando le preguntaron por Lobato, aseguró que no tiene ninguna relación con él y, muy cortante, dijo que no quería dedicarle "ni un minuto a ese asunto".

Sin embargo, la portavoz federal del PSOE, Esther Peña, sí que dijo en una rueda de prensa desde Ferraz que la federación madrileña estaba estudiando en qué situación estaba Lobato, "con todos los datos y la legislación en la mano para tomar una decisión posterior".

En Ferraz tienen dudas de que sean compatibles la Agencia Tributaria y el Senado y, aunque aseguran que es una cuestión "legal y no orgánica", se está abriendo la puerta a pedirle formalmente que renuncie a su acta de diputado. Desde el entorno de Lobato, sin embargo, comunican que no tiene intención de dejar el acta.

Si el partido se lo pide y él se resiste, se podría producir una situación similar a la del exministro José Luis Ábalos, que no renunció a su acta en el Congreso de los Diputados tras pedírselo el partido, fue suspendido de militancia y relegado al Grupo Mixto de la Cámara Baja. Eso, sin embargo, es un escenario todavía muy lejano.