Tomás Serrano

Política SUMAR

Yolanda lanza Sumar con un apoyo del 12,5% aunque absorba a Podemos y toda la izquierda radical

Así lo refleja una encuesta de SocioMétrica para EL ESPAÑOL que será publicada próximamente. Sumar tampoco logra 'sorpasar' a Vox.

2 abril, 2023 03:16
J. C. L.C.

La plataforma liderada por Yolanda Díaz sólo alcanzaría, por el momento, un 12,5% de intención de voto. Y ello, aunque lograse integrar en sus filas a Podemos y al resto de grupos de la izquierda radical, como Compromís, Más País, las Mareas o los comuns.

Además, Sumar como así se llama la plataforma que será presentada como opción electoral este domingo en Madrid tampoco lograría arrebatar a Vox el tercer puesto en las próximas generales.

Así se desprende de la próxima encuesta de SocioMétrica para EL ESPAÑOL, que será publicada próximamente. El sondeo también refleja el pinchazo de las expectativas de Díaz: que Sumar lograse aunar el porcentaje de intención de voto de todos estos grupos y, además, consiguiese arrebatar un porcentaje al PSOE. Finalmente, a la vista de la encuesta, ello no sucede. Al menos, todavía.

"No hay tanta ilusión ni emoción y Sumar presenta más incertidumbres que certezas", valora Gonzalo Adán, director de SocioMétrica. "Dicho 12,5% se obtiene preguntando a los encuestados a quién votarían, considerando que Sumar ha logrado integrar a Podemos en sus filas", explica. Y ese dato refleja que la plataforma encabezada por la ministra de Trabajo apenas obtiene la cifra resultante de sumar la intención de voto de Podemos, Más País y Compromís, los comuns y las Mareas. 

"Es una victoria pírrica", concluye Adán, que ve "fracasado" el plan de presentar "un proyecto de izquierdas más solvente que Podemos" y también el de arrebatar a Vox el tercer puesto, con la intención de que la Ley D'Hont perjudicase a los de Abascal en la cuarta posición.

Contra los pronósticos, Vox no ha pinchado tras la moción de censura. Y se mantiene con su habitual 15% de intención de voto. "La Operación Sumar tenía sentido si la plataforma de Díaz lograba superar a Vox. Y eso, por el momento, no ha sucedido todavía", recalca Gonzalo Adán.

La suma más difícil

No existe ningún plan B a la izquierda del PSOE. Todos los partidos implicados en "el espacio" tienen claro a día de hoy que Yolanda Díaz es será la mejor candidata posible para unas inminentes elecciones generales, pero difieren en las condiciones. Sobre todo, esa hipotética suma de partidos se encuentra dividida en dos facciones: por un lado, la ministra de Trabajo y los partidos regionales; por otro, Podemos.

La formación liderada por Ione Belarra es la única que faltará a la foto de familia de este domingo en Magariños, donde Sumar tendrá su carta de presentación oficial. La oficiosa fue durante la moción de censura de Vox con Tamames como candidato.

El motivo de este plantón: que Yolanda Díaz no tiene pensado organizar primarias abiertas (esto es, de censo libre) para elegir las listas electorales; en parte, por miedo a que la militancia morada colonice el proceso y, por otro lado, por los recelos de los partidos minoritarios, que reclaman otras fórmulas más beneficiosas.

En cualquier caso, si en algo coinciden todos, además de en la idoneidad de la candidata, es en que en la política no existen las bolas de cristal. Todas las fuentes consultadas ponen entre paréntesis las encuestas propias y ajenas; al menos, hasta que finalicen las elecciones autonómicas del 28 de mayo, que serán el verdadero punto de partida de las generales y reequilibrarán los pesos de la izquierda dentro de la plataforma Sumar.

Un buen resultado en las plazas clave Madrid, Valencia o Barcelona— podría suponer un aumento de la movilización en las generales, dada la tendencia habitual con la que funciona este espacio político. Además, si todo sale como se espera y Podemos acaba pactando con Yolanda Díaz para las generales, la ley electoral favorecería todavía más a las izquierdas, que habrían estado divididas en mayo pero se presentarían aglutinadas en diciembre. De hecho, ese es el único motivo por el que confían en que al final, a pesar de todo, acaben dándose la mano, aunque sea on la nariz tapada.