Algunos de los vehículos del clan con el que presuntamente trabajaba el inspector jefe detenido.
Detenidos Vilma y Miguel, los 'fruteros' que metieron el mayor alijo de coca de la historia junto al jefe de la UDEF en Madrid
La pareja se entrega tras meses de fuga. Suya era Abadix Fruits, la empresa con la que el clan del inspector jefe intentó meter 13 toneladas en España.
Más información: El policía jefe de Blanqueo de Madrid usó durante años el chat cifrado del narco para introducir droga en España.
La investigación de UDYCO Central y la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional acaba de detener a los dueños de la empresa con la que el clan del inspector jefe de la UDEF, Óscar Sánchez Gil, trató de meter en España 13 toneladas de cocaína a través de un solo envío por el puerto de Algeciras.
Así lo confirman fuentes conocedoras de la investigación a EL ESPAÑOL. Se trata de Vilma J. A. B. y de Miguel Ángel B. C., quienes estaban detrás de la empresa Abadix Fruits S.L., una compañía dedicada sobre el papel a la importación de fruta desde Latinoamérica pero de la que el clan se valía para colar en España toneladas de droga camuflada entre esos mismos alimentos.
Ese alijo es considerado tanto por la Fiscalía Especial Antidroga de la Audiencia Nacional, a cargo de la investigación, como por parte de los investigadores como el mayor de la historia incautado en España y el segundo más grande hallado en el continente europeo.
La pareja se entregó este pasado lunes en una comisaría del centro de Madrid. En total esta macrooperación suma un total de 20 detenidos, entre ellos el inspector jefe de UDEF, alias Anodino, quien para los investigadores era un narcotraficante más en el seno de la organización desarticulada, dedicado durante años a colaborar con los grandes clanes del continente tanto para meter droga en España como para presuntamente facilitar el lavado de dinero a las principales estructuras criminales del mundo del narcotráfico de la UE.
La trama de Sánchez Gil, el policía al que hallaron 20 millones de euros emparedados en su casa, utilizaba la empresa Abadix Fruits S.L. para importar contenedores repletos de cajas de plátanos a puertos españoles. Dentro de ellos viajaba, camuflada, una gran cantidad de droga.
La empresa
La empresa tiene su sede en Alicante, fue creada en 2018 y cuenta con más de 100 envíos de plátanos de Ecuador a España. Los dos administradores de la sociedad estaban en búsqueda y captura hasta este lunes.
La Policía recibió información de ese envío y lo prepararon todo para atrapar in fraganti a quienes estaban tras el alijo. Sin embargo, según fuentes de la investigación, la trama recibió el chivatazo por parte del inspector jefe de la UDEF de que esa operación estaba siendo monitorizada por sus compañeros dedicados a la lucha contra el narcotráfico.
Sus socios delictivos abandonaron el cargamento y se dieron a la fuga. Meses después caería el propio mando policial con una investigación levantada por la UDYCO Central y Asuntos Internos sobre su papel presuntamente crucial en esta organización criminal.
La detenida, Vilma, tiene 51 años y es de nacionalidad ecuatoriana. El otro arrestado, Miguel, tiene 58 y es español.
Entre los detenidos hay testaferros, asesores fiscales, seis blanqueadores de dinero que el clan tenía a sueldo y que proporcionaban la estructura financiera necesaria para ocultar las ganancias, la mujer del inspector jefe, también policía, y la hermana de esta, sobre quien los investigadores sospechan que orbita buena parte del entramado de blanqueo del dinero procedente del negocio de la droga.
"Un capo más"
La magnitud de este alijo, el mayor en la historia de España, pone de relieve, tal y como recalcan fuentes de Asuntos Internos, UDYCO Central de la Policía Nacional y la Fiscalía Antidroga, la cantidad de tiempo que Óscar Sánchez Gil llevaba siendo, prácticamente, "un capo más" del tráfico de estupefacientes a nivel internacional.
Como adelantó este periódico, El Anodino llevaba mucho tiempo facilitando la entrada de toneladas de droga en territorio nacional mientras desarrollaba su trabajo persiguiendo el blanqueo de capitales desde la Policía Nacional. Según reveló EL ESPAÑOL, el inspector jefe utilizaba como el resto de narcotraficantes Sky ECC, el chat cifrado que empleaban las grandes redes del crimen organizado en Europa hasta 2021, cuando fue desencriptado.
Este hecho evidencia que por lo menos esta estructura criminal llevaba 5 años a pleno funcionamiento gracias a los chivatazos y a la cobertura de este inspector jefe.
Se sospecha que los 20 millones de euros en efectivo que el inspector jefe tenía emparedados en su casa —vivienda en la que convivía con su mujer, también detenida— proceden de las comisiones que habría cobrado por facilitar la entrada de droga en España. Por cada envío, según los investigadores, Sánchez Gil recibía un amplio porcentaje. Luego su entramado, del que participaba su cuñada, echaba mano de criptomonedas, licencias VTC y otras herramientas fiscales para blanquear ese dinero.