La Guardia Civil ha detenido a tres personas e investiga a otra más por un delito de defraudación de fluido eléctrico por valor de 160.000 euros llevado a cabo en cuatro naves industriales de Albacete utilizadas como granjas de criptomonedas que además presentaban graves deficiencias de seguridad y un alto riesgo de incendio.

La operación Rabosot arrancón en julio, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de que varias personas con antecedentes policiales por tráfico de drogas podrían estar alquilando naves industriales en Albacete y Chichilla de Montearagón.

En el curso de esas investigaciones, los agentes comprobaron que los espacios alquilados carecían de actividad industrial pero registraban unos consumos eléctricos desorbitados. Estos indicios les llevó a pensar, en un primer momento, que se trataba de plantaciones indoor de cultivo de marihuana.

Sin embargo, una vez analizados esos consumos, que provenían de enganches ilegales, constataron que eran, además de muy elevados, uniformes las 24 horas. Este detalle les hizo sospechar que en lugar de cultivar droga, la banda mantenía granjas de criptomonedas.

Los efectivos de la Guardia Civil llevaron a cabo cuatro registros en los recintos investigados en los que pudieron intervenir 68 sistemas informáticos de alta gama de los conocidos como máquinas de minería de Bitcoin así como sofisticados equipos informáticos auxiliares y de refrigeración.

Enganches muy peligrosos

En el momento en el que los operarios realizaron las desconexiones de los enganches eléctricos interiores, se constató que habían sido manipulados, situación que comportaba un peligro real de incendio en las naves y un enorme riesgo de electrocución para las personas que estaban haciendo uso de ellas.

Además, con el ánimo de no ser detectados, los detenidos habían ideado un ingenioso sistema de seguridad que permitía desconectar automáticamente toda la infraestructura eléctrica ilegal de las naves cuando se iban a realizar las comprobaciones o mediciones correspondientes. Además, contaban con otros sistemas de seguridad como cámaras de videovigilancia y sensores de movimiento en las entradas de las naves industriales.

Las granjas de criptomonedas son instalaciones en las que se ubican los sistemas informáticos necesarios para realizar las actividades de desencriptación de los códigos tras los cuales se esconden nuevas monedas virtuales como el Bitcoin. A esta actividad se le domina minería de criptomoneda.

La Guardia Civl destaca que esta práctica no es una actividad delictiva, pero las necesidades de suministro eléctrico continuo y de refrigeración requeridas por los sistemas informáticos hacen que el gasto energético sea equiparable al necesario a nivel industrial. Por tal motivo, las granjas aparecen en ocasiones asociadas a delitos de defraudación de fluido eléctrico.

La operación ha sido llevada a cabo por el Equipo Territorial de Policía Judicial de Almansa y han participado del Equipo de Investigación de Casas Ibáñez, del Área de Investigación de Almansa, la Unidad Orgánica de Policía Judicial, la USECIC, así como patrullas de los Puestos de la Guardia Civil de Fuente-Álamo y de Chinchilla de Montearagón (Albacete).