
El CEIP Rosa Parks de Toledo.
Un año de cárcel para el padre que dio un puñetazo al director del colegio Rosa Parks de Toledo
El agresor tendrá que ingresar en la cárcel obligatoriamente al tratarse de una persona con antecedentes penales.
Más información: Un padre da un puñetazo al director del colegio Rosa Parks de Toledo tras acceder al centro en actitud muy violenta
El hombre que dio un puñetazo al director del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Rosa Parks de Toledo ha sido condenado a un año de prisión. Así lo refleja el acuerdo alcanzado entre ambas partes antes del juicio que estaba previsto celebrarse este martes en los juzgados de la capital regional.
El agresor tendrá que ingresar en la cárcel obligatoriamente al tratarse de una persona con antecedentes penales, tal y como ha explicado en declaraciones a EFE el abogado de la acusación particular y del sindicato docente STE, José Emilio Rubio.
Además, tendrá prohibido acercarse o comunicarse con la víctima y con el centro educativo durante dos años y medio. Al considerarse un delito de lesiones leves, le ha sido impuesta una multa de seis euros diarios durante dos meses, es decir, de alrededor de unos 360 euros.
Los hechos ocurrieron el pasado 5 de febrero cuando los servicios de Protección de Menores se llevaron a unos niños, entre ellos el hijo del agresor. Tras conocer el paradero de su hijo, el hombre accedió con una actitud violenta al colegio, ubicado en el barrio del Polígono. Una vez en el interior, insultó y amenazó a los docentes y terminó propinando un puñetazo al director.
Por su parte, el representante en Toledo del sindicato STE, Gonzalo Ballesteros, ha celebrado la "valentía" de la víctima porque, a su parecer, es necesario que se denuncien este tipo de conductas violentas en el ámbito educativo. A este respecto, ha lamentado que estos casos "no son algo puntual".
Inseguridad en los colegios
"La escuela y la sociedad se han separado, los docentes no somos el enemigo", ha incidido. Por otro lado, ha exigido a la Delegación de Educación que tome cartas en el asunto de la seguridad, ya que "el centro había solicitado presencia policial y no la había".
"El director y el resto de profesores se sintieron abandonados a su suerte, esto no se puede concebir", ha concluido Ballesteros.