La Policía Nacional ha descartado que haya un cuarto implicado en el atropello múltiple que se saldó con cuatro personas fallecidas y otros cuatro heridos de diversa consideración a la salida de una boda este sábado en Torrejón de Ardoz (Madrid). En un primer momento, cuando el conductor del coche y sus dos hijos menores de edad fueron detenidos en Seseña (Toledo), los investigadores creían que un cuarto implicado -sobrino del conductor del vehículo- había logrado huir, un extremo que ahora descartan.

Así lo apunta la agencia Efe citando a fuentes de la Jefatura Superior de Policía que aseguran que ha quedado constatado que este cuarto sospechoso, un hombre de 18 años sobrino del hombre que conducía el coche, no se encontraba en el interior del coche cuando se produjo el atropello.

EL ESPAÑOL ha constatado que la reyerta se produjo pasadas las 2:00 de la madrugada cuando los tres miembros del clan Da Silva se encontraban fuera del restaurante El Rancho donde se celebraba el banquete de una boda. En ese momento, el padre, de 35 años y nacionalidad portuguesa, pisó a fondo el acelerador de su Toyota Corola arrollando a varios asistentes que abandonaban el restaurante. Junto a él se encontraban sus dos hijos, de 16 y 17 años. 

[Tres detenidos en Seseña por un atropello intencionado en el que han muerto cuatro personas]

Otras fuentes apuntan a que los hechos se precipitaron cuando algunos de los invitados se percataron de la presencia de los Da Silva a la salida del local y les recriminaron que estuvieran allí. Al parecer, el sobrino de 18 años que en un primer momento se creyó que también estaba implicado, habría mantenido o intentado mantener una relación con la novia. A partir de ahí, se desencadenó el atropello múltiple que se saldó con la muerte de una mujer de 66 años y tres hombres de 68, 37 y 17 años, todos españoles. Además, dejó a otras cuatro personas heridas graves, dos moderadas y otras dos leves, según informaba el SUMA.

El presunto asesino y sus hijos huyeron hasta que hacia las 4:00 de la madrugada llegaron a la urbanización 'El Quiñón' de Seseña (Toledo) a unos 50 kilómetros del lugar de los hechos. Allí fueron interceptados por agentes de la Guardia Civil y la Policía Local de Illescas que les detuvieron cuando intentaban huir. En el interior del coche, sin parachoques y con numerosos desperfectos por el atropello, los agentes encontraron alrededor de 5.000 euros cuya procedencia todavía no está constatada. 

En un primer momento, los tres detenidos fueron conducidos al cuartel de la Guardia Civil de Seseña hasta que se hizo cargo de ellos el Grupo Sexto de Homicidios de la Policía Nacional. Este lunes, está previsto que el autor del atropello pase a disposición judicial acusado de cuatro homicidios dolosos y siete en grado de tentativa. Sus dos hijos, menores de edad, fueron puestos en libertad después de prestar declaración.

Marlaska espera que la investigación concluya "pronto"

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se ha referido este lunes en Cuenca a la investigación de este cuádruple crimen y ha asegurado que espera que concluya "pronto". 

Durante una visita visita para constatar el avance de las obras de la nueva Comisaría de la Policía Nacional de Cuenca, ha asegurado que no dispone de más datos sobre este hecho "absolutamente trágico" y ha trasladado su solidaridad a las familias de los fallecidos, a la par que ha esperado una pronta recuperación de todos los heridos.

"Tenemos la satisfacción de que inmediatamente fueron detenidos tres de los supuestos intervinientes en Seseña y en ese sentido, gracias a la cooperación de nuestras Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado, se permitió que fueran detenidos a 40 kilómetros de los hechos por la Guardia Civil", ha expresado Grande-Marlaska según informa Europa Press.

Además, ha asegurado que esa coordinación entre el Instituto armado y la Policía Nacional ayudó "desde el primer momento" a que la investigación "se encauzara", y se ha mostrado confiado en que concluya "pronto".