La sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete ha suspendido este viernes el juicio que estaba previsto celebrarse contra el hombre acusado de cometer una agresión sexual a una prostituta en la capital albaceteña. El aplazamiento se hadebido a que la víctima no ha sido localizada, por lo que se espera que el juicio se pueda celebrar el próximo 6 de julio, han informado fuentes judiciales. El juicio ya tuvo que ser suspendido en febrero.

El acusado, de nacionalidad malí, es S.M., según consta en el escrito de acusación de la Fiscalía, y la denuncia se remonta a la tarde del 4 de julio de 2017, cuando el procesado y la denunciante se encontraron en la calle García Lorca de la capital, junto a la Estación de Autobuses.

El relato de la acusación pública dice que S.M. y la mujer acordaron dirigirse a una arboleda situada en la carretera de Ayora "para mantener relaciones sexuales a cambio de dinero”, pero al llegar allí S.M. le dijo a la mujer "que no tenía dinero y que le pagaría posteriormente".La mujer se negó entonces a mantener relaciones sexuales e intentó marcharse.

Ante esa negativa, el acusado "la empujó y la tiró al suelo, introduciéndole la mano en la boca, impidiéndole respirar" para quitarle la ropa, le dijo a la mujer que si no accedía a mantener relaciones sexuales "la mataba y que no se iba a enterar nadie", y a continuación la violó "pese a que la mujer le insistía que no lo hiciera".

Una vez terminado el acto sexual, la mujer pudo vestirse y abandonar el lugar, y puso la denuncia en Comisaría dos días después, el 6 de julio.

El fiscal ha indicado que a consecuencia de la agresión, la víctima sufrió "absceso submandibular con extensión a tejido celular subcutáneo de región submentoniana y musculatura cervical", entre otras lesiones, y tardó 19 días en curar, quedando como secuela una cicatriz irregular e indurada de un centímetro en región submandibular.

La petición de condena que hace el fiscal para S.M. es de nueve años de prisión por el delito de agresión sexual y otro año y medio de cárcel por el delito de lesiones, además de 10 años de libertad vigilada, y que pague una indemnización de 7.300 euros a la víctima.