Peluquerías y salones de belleza han vuelto a abrir sus puertas esta semana con un aluvión de citas previas y la puesta en marcha de multitud de medidas de seguridad para seguir luchando contra el coronavirus. Este protocolo incluye el uso obligatorio de mascarillas y guantes, la desinfección de las herramientas de trabajo, la utilización de material desechable o el cumplimiento de la distancia de seguridad.

Cada cliente, atendido de manera individual, debe entregar sus pertenencias en la entrada, que son incluidas en bolsas herméticas y entregadas a la salida. Además, los mayores de 65 años tienen preferencia durante el horario de sus salidas.

Araceli Moreno, uno de los salones de peluquería y estética más visitados en Albacete, ha levantado su persiana este lunes después de haber realizado un ERTE a toda la plantilla dada la "situación insostenible" durante los últimos meses.

Lo ha hecho con la incorporación de todas las medidas de higiene posibles, a puerta cerrada, y siguiendo con el protocolo de desinfección. Para ello, se ha creado una zona "sucia" a la entrada de la peluquería, donde se le entrega a cada cliente guantes, mascarilla, gel hidroalcohólico, calzas para los pies y bolsas para introducir los objetos personales. Además, se ha incorporado una máquina de ozono para asegurar la desinfección del local.

A pesar haber tenido la oportunidad de abrir en la fase 0, Araceli considera que "hay que tener en cuenta que esta situación va a afectar bastante a las peluquerías, ya que de momento hay muchos servicios que no se pueden hacer, sobre todo de estética, a lo que hay que sumar la cancelación de eventos para esta época del año".

No obstante, la peluquera espera "remontar" y poder incorporar así al resto de la plantilla, para la que todavía se mantiene expediente de regulación temporal de empleo. "De momento, se están cogiendo bastantes citas y la gente está siendo muy flexible con los horarios".

"Esperamos que cuando pase todo esto el Gobierno tome medidas sobre el IVA y las peluquerías y salones de belleza pasen a ser artículos de primera necesidad y no de lujo", ha concluido.