El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha sorprendido este miércoles con unas declaraciones sobre salud mental en las que ha elogiado y ha puesto puesto como referente al líder de Más Madrid, Íñigo Errejón, antiguo compañero de Pablo Iglesias y de los actuales socios del PSOE en el gobierno de Pedro Sánchez.

Page ha pedido tener "sensibilidad absoluta" con el problema de la salud mental toda vez que la crisis sanitaria está elevando el número de pacientes. En ese sentido ha puesto en valor la postura de Íñigo Errejón y ha deseado que la gente "escuche" más sus tesis al respecto.

Page ha hecho alusión a las palabras de Errejón del mismo miércoles en la Cadena Ser, donde ha reivindicado aumentar las plazas públicas de psicólogos para atender a la población.

"Le he escuchado y le tengo que felicitar, porque es la segunda o tercera vez que lo ha puesto de manifiesto. A ver si algunos de sus excolegas aprenden y ponen el dedo en la llaga en el problema de la salud mental", ha dicho García-Page. Con la pandemia el problema se ha agudizado, dice el presidente castellano-manchego.

Por ello ha demandado "sensibilidad" no sólo ante la problemática sino también ante la necesidad de aumentar el número de recursos que se dedican a sus tratamientos ante una parte del sector político, que "destila un argumentario como de repelús, de rechazo, de pasar a un segundo plano esta enfermedad".

La intención de Page ha sido doble. Por un lado, apoyar la decisión de su gobierno de usar el Hospitalito del Rey de Toledo como centro de referencia para pacientes de salud mental, citando a Errejón como autoridad en la materia al defender la tesis de que cada vez es más necesario aumentar el número de plazas destinadas a ese fin. Sin embargo, Errejón puede ser una autoridad en materia política pero no está en absoluto demostrado que lo sea en el ámbito de la atención sanitaria. Por eso creemos que a Page le ha movido una segunda intención a la hora de citarle: la de poner en evidencia a sus antiguos compañeros de Podemos, que a juicio de Page y del PSOE, son los que mueven los hilos de la protesta de la plataforma llamada “Hospitalito YA!”, que lucha para que el edificio sea destinado a residencia de mayores, tal como se proyectó originalmente al reformarse el inmueble.

Y cabría aún otra intención más en Page. La de contraponer la figura de Errejón como líder de una formación más a la izquierda del PSOE a la de los dirigentes de Unidas Podemos y a la de los ministros de este partido que están en el Gobierno de Pedro Sánchez. Quizá la comida que tuvo Bono con Errejón hace unas semanas en Toledo tenga algo que ver con todo esto. El tiempo lo dirá.