María Dolores de Cospedal guarda absoluto silencio sobre su futuro y tiene a todos desconcertados en el PP. Sus colaboradores sospechaban con motivo que la castellano-manchega había decidido abandonar la política después del doble varapalo que supuso para ella perder en pocas semanas el Ministerio de Defensa y de caer en la primera ronda de las primarias de su partido. Sin embargo, las sensaciones de quienes le rodean apuntan a que durante estos días estaría reconsiderando su decisión debido a la alegría que ha supuesto para ella que haber contribuido de manera decisiva a que Pablo Casado haya sido elegido como nuevo presidente del PP superando a Soraya Sáenz de Santamaría, de la que ha estado completamente distanciada durante los últimos años.

Tal y como les contaba el pasado lunes EL DIGITAL, una opción que estaría barajando Casado, muy agradecido por el apoyo recibido por parte de Cospedal y del PP de Castilla-La Mancha, sería incluir en el organigrama directivo una Vicepresidencia (que desapareció en 1990) y ofrecérsela a la que hasta hace unos días era secretaria general. Varios medios de comunicación nacionales apuntan en ese sentido y especulan con que Cospedal, lejos de abandonar la primera línea política, valore adquirir una nueva responsabilidad en el PP, de mayor rango incluso que la Secretaría General que ha ocupado durante la última década y de la que se despidió, con la voz entrecortada, el pasado viernes en el Congreso Extraordinario en el que los compromisarios eligieron al sucesor de Mariano Rajoy. Las palabras de la ex presidenta en ese cónclave sonaron a despedida, pero Cospedal se encargó de no cerrarse ninguna puerta: "Lo que nos depare el futuro está por ver".

Además, Cospedal sabe que con la victoria de Casado su opinión en el partido puede ser muy relevante e influyente, algo que en ningún caso hubiese ocurrido de haber triunfado Soraya Sáenz de Santamaría. De hecho, EsDiario cuenta que, antes del Congreso, Casado pactó con Cospedal que si ella le daba su apoyo explícito, como así ocurrió resultando determinante, "podría elegir al portavoz en las Cortes" y "tener voz en la elección del secretario general".

Así, el citado medio coloca a la ex ministra Dolors Montserrat como la mejor situada para hacerse con la Portavocía del PP en el Congreso de los Diputados, ya que la catalana fue la portavoz de la campaña de Cospedal en la primera vuelta de las primarias del PP, por lo que la castellano-manchega "siente gran agradecimiento" por ella. Sin embargo, otros medios como El País y El Confidencial apuntan a Montserrat como la opción con más fuerza para ocupar la Secretaría General del partido, aunque en las quinielas para ese puesto incluyen también a la ex ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, y a la ciudadrealeña Rosa Romero, vicepresidenta del Congreso. Las tres, sin duda, son mujeres de la plena confianza y agrado de una Cospedal que se siente de nuevo con máxima capacidad de decisión e influencia.

Pese a todo, lo que parece casi descartado es que Cospedal vuelva a pelear por la Presidencia de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en las elecciones autonómicas de 2019, aunque su futuro al frente del PP castellano-manchego se resolverá después de aclarar su nuevo papel (si es que acepta tenerlo) en la política nacional.