Bodega Vinícola de Castilla, de Manzanares (Ciudad Real), paralizará la actividad de la planta de embotellado la próxima semana ante las dificultades que están teniendo por la huelga de transportistas, y aprovechará para hacer cursos de formación y mantenimiento de sus viñedos.

Así lo ha confirmado a Efe el responsable de Transporte, David Álvarez, quien ha justificado esta decisión en los problemas que están teniendo para sacar la mercancía y atender los pedidos, una situación que también afecta a la recepción de material auxiliar, cuyos pedidos se han paralizado o anulado.

Ante este panorama, la dirección de la empresa vinícola ha optado porque los 12 trabajadores que desarrollan su actividad en el embotellado se dediquen durante una semana a formarse y a realizar labores en los viñedos que posee la bodega.

Las dificultades para desarrollar el trabajo con total normalidad afectan también a otras bodegas que “están a medio gas”, como Félix Solís y Avantis, dos de los grandes operadores de Castilla-La Mancha, aunque la situación podría agravarse si la huelga se prolongara en el tiempo.

De momento, han reconocido a Efe que los almacenes se están llenando con el producto al que no pueden dar salida, pero si no se soluciona el conflicto, "habrá que plantearse la posibilidad de parar la actividad”.