Imagen de archivo.

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Economía

Las mujeres castellano-manchegas tardan casi tres años más que los hombres en pagar su casa

Según un estudio de UGT, el precio medio de la vivienda se sitúa en 111.669 euros y las mujeres destinan a la compra el 30 por ciento de su sueldo bruto. 

21 agosto, 2023 13:16

Las mujeres trabajadoras de Castilla-La Mancha tardan de media 2,65 años más que los hombres en pagar su vivienda, destianando a la compra el 30 por ciento de su sueldo bruto. 

Así se extrae de un estudio de UGT elaborado a partir de los datos de los últimos salarios medios correspondientes a 2021 facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y los precios para vivienda nueva y de segunda mano.

Según ha informado el sindicato en nota de prensa, Castilla-La Mancha es la cuarta comunidad autónoma de España con menor brecha salarial. A nivel nacional, las mujeres tardan tres años y nueves meses más que los hombres en comprar un inmueble. 

Más de 17 años en pagar la vivienda

En nuestra región, el precio medio de la vivienda en 2021 se situó en 111.669 euros, mientras que el salario medio bruto anual fue de 21.154 euros en el caso de las mujeres y 24.897 en el de los hombres.

Con estas cifras, las mujeres tardan 17,6 años en poder pagar su vivienda mientras que en el caso de los hombres son 14,95 años.

Diferencia por sectores y tipo de contrato

El sector en el que se trabaja y la diferencia salarial también influye en esta diferencia, dado que la horquilla oscila de nueve años más en actividades administrativas y servicios auxiliares a casi cinco años en actividades profesionales, científicas, y técnicas.

Por otra parte, trabajar a tiempo parcial dificulta el acceso a una vivienda en solitario. En España, dos millones de mujeres y algo más de 500.000 de hombres trabajan con este tipo de jornada laboral.

Para hacer frente al precio de la vivienda, tal y como ha explicado la secretaria de Políticas Sociales e Igualdad de UGT regional, Azucena Dombriz, "estas personas se encuentran ante una doble tesitura; o viven en condiciones ínfimas o están abocadas a depender de otra persona".

"La realidad es que muchos jóvenes con este tipo de contratos están prolongando durante años el alojamiento en pisos compartidos o de alquiler, a precios más altos incluso de lo que puede costar una cuota mensual de una hipoteca", ha señalado.

Por ello, desde UGT consideran que "hay que seguir incidiendo en la estabilidad laboral, avanzar en la subida del SMI y garantizar contratos a tiempo parcial voluntarios y con condiciones salariales adecuadas".