El Real Madrid no tiene ni un día tranquilo. Ahora que el club funciona deportivamente y que vive en la nube que ha creado el excelente nivel de Vinicius, le surge una nueva polémica. Uno de los jugadores que han sido protagonistas de su enfermería en los últimos meses ha sido convocado por su selección incluso antes de reaparecer. Se trata de Gareth Bale. 

El jugador galés se lesionó en la previa del partido contra el Celta en el Santiago Bernabéu. Sufrió una importante lesión muscular que iba a tenerle cerca de ocho semanas de baja. De hecho, su último partido con la camiseta del Real Madrid fue a últimos de agosto, el día 28 y en el Benito Villamarín frente al Betis. 

Bale todavía no ha regresado, sin embargo, en Gales ya cuentan con él. El seleccionador Robert Page le ha incluido en su lista de convocados sabedor de la gran importancia que tiene su máxima estrella para todo el país y para todo el equipo de cara a los partidos para la clasificación hacia la Copa del Mundo de Catar 2022. 

Gales necesita apurar sus opciones de estar en la Copa del Mundo y tendrá en el parón internacional de noviembre dos complicados partidos ante Bielorrusia y Bélgica. Y en ellos se espera que esté Gareth Bale a tenor de la intención mostrada por la Federación Galesa y por la llamada de Robert Page. 

La cronología de Bale

Lo llamativo es que esta convocatoria podría suponer un hándicap muy importante en los intereses del Real Madrid, club del jugador y que lleva sin poder contar con el galés casi dos meses. Además, la lesión de Bale llegó provocada, en parte, por la enorme carga de minutos que tuvo el extremo en el parón en el parón de septiembre. 

Bale disputó 180 minutos en apenas tres días, el 5 de septiembre ante Bielorrusia, encuentro en el que anotó tres tantos vitales para darle la victoria a Gales, y después el día 8 frente a Estonia. El extremo llegó tocado con una sobrecarga que le hizo perderse algunos entrenamientos con el equipo blanco. 

Gareth Bale con el balón de su hat-trick con Gales Reuters

Horas más tarde llegó ese duelo contra el Celta y en la previa, Bale sufrió un importante dolor en sus isquios que, tras someterse a las pertinentes pruebas médicas, se terminó definiendo como una rotura fibrilar. El tiempo de baja estimado era de dos meses, pero el Real Madrid tenía la esperanza de que pudiera recortar en cierto modo los plazos sin correr riesgos. 

Desde un primer momento se puso el ojo en el partido de la cuarta jornada de Champions contra el Shakhtar Donetsk. Sin embargo, el galés no viajará a Ucrania y parece que tampoco estará disponible en el choque del próximo fin de semana contra el Rayo Vallecano. Esa es ahora mismo la incógnita con el extremo zurdo del Real Madrid. 

Si Bale no estuviera en el duelo del Santiago Bernabéu frente al equipo de Andoni Iraola, uno de los conjuntos revelación de la temporada, lo más probable es que Bale regresara con la misma camiseta con la que disputó su último partido, la de Gales, una circunstancia que agravaría aún más la difícil situación de Gareth en el club y que sin duda alejaría más su deseo de renovar con la entidad merengue. 

[Más información: Las 11 curiosidades de Gareth Bale: el 'Expreso de Cardiff' de las luces y sombras en el Real Madrid]